Marcelo Macellari C. - La Estrella de Valparaíso

Paola Volpato es una de las protagonistas de "Casimiro", una obra de radioteatro en vivo que originalmente se iba a estrenar en el Anfiteatro Bellas Artes de Santiago, pero por el retroceso de la Región Metropolitana a fase 2 su debut será este domingo (18.00 horas) en el Parque Cultural de Valparaíso, en función gratuita previa inscripción en santiagoamil.cl. "La directora Elisa Zulueta tomó la obra del dramaturgo chileno Armando Moock y la transformó en un radioteatro. Estamos los actores en vivo, sentados con nuestro texto y vamos caracterizando a los personajes, dándole vida a esta obra que es muy bonita, porque además habla de la precariedad de los actores y este mundo incierto, donde siempre estamos tratando de trabajar y los contratos se acaban. Eso hoy se ha hecho más carne que nunca".

La adaptación de "Casimiro Vico, primer actor" (1937), uno de los clásicos del teatro chileno, cuenta la historia de un sastre ingenuo y soñador, quien tiene un profundo anhelo por ser actor. Al ser tentado por un grupo de aduladores amigos actores que están en la ruina, pone todo su capital para fundar una compañía de teatro, donde naturalmente él sería el primer actor; y su esposa, su acompañante. De ahí en adelante, todo deviene en traiciones y fracasos para él. El elenco también incluye a Sergio Hernández, Antonia Santa María y Héctor Morales, entre otros.

-¿Cómo se conecta este clásico nacional con la situación actual del teatro?

-La incertidumbre de la profesión del actor. Los actores amamos nuestro espacio de creación y en "Casimiro" vemos esos altibajos a los que estamos siempre sometidos. La obra se conecta con la precariedad de nuestro oficio de actores y el ego, porque la necesidad no es solo actuar, sino que te vean y te adulen. Nos reímos de este mundillo efímero, donde uno puede interpretar a una princesa o un gobernante famoso, pero después tiene que esperar en la estación de trenes hasta conseguir la plata para el boleto.

-¿La precariedad tiene que ver también con el hecho de que en el actual escenario, la cultura no es un ítem prioritario?

-Ni siquiera nos ven, pero sabemos que somos importantes para la gente y que el encierro se sostuvo gracias a la cultura. La gente necesita belleza, necesita pensar. Eso solo lo da el mundo cultural. Es bien dramático, porque estamos abandonados, y ahora que pensábamos que se abría el panorama, con los teatros funcionando aunque fuera con aforo reducido, volvimos a fase 2, mientras los mall siguen abiertos. Nuestro oficio este año ha estado súper golpeado y con lo que digo no estoy desconociendo que las otras áreas no estén golpeadas. Yo he dicho que sí a todo lo que me han propuesto y lo tomo como resistencia, como una forma de decir estamos aquí.

A lo kardashian

Paola Volpato graba actualmente la nueva teleserie de Mega "Edificio Corona". La producción de las 20 horas narrará la historia de los residentes de un edificio que deben hacer una estricta cuarentena luego de que uno de sus habitantes fuera diagnosticado con coronavirus, centrado así el eje de la historia en la pandemia. La actriz de "Pituca sin lucas" interpreta a Ágata, quien llega a desordenar la vida del conservador administrador del edificio (Francisco Melo) con su extrovertida personalidad y excéntrica vida luego de convertirse en millonaria de casualidad junto a sus hijas Rubí (Vivianne Dietz) y Esmeralda (Magdalena Müller). El personaje de Ágata y el de sus hijas se inspiran en el famoso clan Kardashian.

-Este año no has dejado de estar en pantalla, con la repetición de "Pituca sin lucas", "Pobre gallo" y "Aquelarre".

-Qué atroz, pobre gente (jajajaja). Están repitiendo todas las teleseries, pero a través de las redes sociales me he dado cuenta que la gente está súper agradecida. Para mí es terrible y digo "por favor, esto es como circo pobre, cambien a esa actriz", pero al parecer el público me quiere y le gusta mi trabajo. La verdad es que me siento miserable haciendo nada, por eso hago todo lo que venga. Después de lijar todos los muebles de mi casa, arreglar las goteras y esmaltar la tina, en marzo ya estaba todo listo.

-Al inicio de la pandemia grabaste la serie "Historias en cuarentena", que tenían un contenido dramático y realista. Ahora "Edificio Corona" es comedia. ¿Se puede hacer humor con el coronavirus?

-Es humor, pero no tomarse con liviandad la pandemia, sino cómo vivimos el encierro y las situaciones que pueden suceder. Pero más que una visión humorística, es tomarle el lado positivo a lo que estamos viviendo y las cosas cotidianas, como las raíces del pelo sin teñir o los perros estresados. Claramente uno no toma la parte más dura y sensible del asunto.

-Sin embargo, cuando debutó el primer spot hubo críticas en redes sociales por tomar a la ligera el tema de la pandemia.

-Siempre va a haber gente que critique y todo bien. Yo me siento más cómoda reflejando la realidad y la contingencia, pero también debemos entender que uno puede tener una mirada fresca de este edificio particular en el contexto mundial que se vive por el virus.