Natividad Espinoza R.

Comunicarse oralmente con otros como se hacía antes de la llegada del Covid-19 a Chile ahora sólo es posible entre quienes viven bajo un mismo techo. Para hablar con personas ajenas al hogar, en tanto, es estrictamente necesario usar mascarilla para evitar posibles contagios de coronavirus.

Pese a que el también llamado tapabocas -que además siempre tiene que cubrir la nariz- es un elemento de protección personal (EPP) imprescindible estos días, trae consigo un problema importante: dificulta la comprensión de las palabras entre los interlocutores.

El fonoaudiólogo académico de Fonoaudiología en la Universidad Mayor (sede Temuco) y diplomado en Vocología de la Universidad de Chile, Gonzalo Inostroza, sostuvo a este medio que hace dos semanas él y otros profesionales usaron un sonómetro -instrumento que se puede configurar para que imite el oído humano- para ir probando cómo el uso de distintos EPP alteraba la escucha de las palabras.

Así, contó Inostroza, "de este estudio obtuvimos que el uso de mascarillas lleva a una considerable baja en la escucha de frecuencias desde 2.000 hertz en adelante", que justamente abarca las palabras que usa el ser humano para comunicarse, que van desde los 2.000 hasta los 5.000 hertz, aproximadamente.

Entonces, en la actualidad es más complicado escucharse, pero hay otro factor que hace todavía más difícil la comprensión entre unos y otros. ¿Cuál? El hecho de tener gran parte de la cara tapada por la misma máscara.

De acuerdo a la presidenta del Colegio de Fonoaudiólogos, Marcia Toloza, "hay que recordar que la comunicación es un todo. Requiere de la voz, la gestualidad y también la expresión facial".

¿alzar la voz?

Frente a tantas dificultades para una comunicación oral efectiva, la tendencia es a alzar la voz para que el receptor pueda captar mejor el mensaje. No obstante, Inostroza advirtió que esto puede ser peligroso debido a que puede causar disfonía -alteración del timbre de voz debido a cambios en las cuerdas vocales- o afonía, que es la pérdida total o parcial de la voz.

"Tanto trabajadores de la salud, que tienen que usar doble mascarilla más escudo facial para atender, como otras personas que trabajan mucho con la voz, han llegado a mi consulta con este tipo de problemas", comentó. Y según Toloza, esto le puede pasar a cualquier persona.

Asimismo, el experto dijo que forzar la voz es difícil de controlar, puesto que se da de forma innata. Muchas veces sin conciencia de lo que está haciendo, uno adecúa el volumen para ser escuchado.

Afortunadamente, antes de la disfonía o afonía se pueden dar ciertos signos o síntomas que indican alteraciones de la voz, de modo que hay forma de evitar llegar a estos extremos. Toloza dijo que éstos son fatiga, ronquera, cansancio al hablar y además un carraspeo frecuente. "Ante esto, la indicación es consultar a un otorrinolaringólogo y, si después se requiere terapia, a un fonoaudiólogo", aseguró.

Cómo darse a entender

Para mejorar la comunicación con mascarilla, sin forzar la voz, Inostroza entregó cinco consejos.

1 Mantener el contacto visual con el interlocutor.

2 Siempre y cuando sea posible, minimizar los ruidos ambientales. Según el experto, "si uno está en la calle no hay mucha opción, pero si se está en un lugar cerrado se puede apagar la música o la televisión".

3 Regular la velocidad del habla. "Si además de tener la mascarilla, que ya atenúa un poco el sonido, hablo rápido, obviamente que mucho menos se va a poder comprender", sostuvo el especialista en voz.

4 Acompañar siempre el mensaje con una expresión del cuerpo y las manos. Lo que se hace con las manos, la cara y el resto del cuerpo mientras uno habla se conoce como lenguaje no verbal y hoy es más importante que nunca. "Como la mascarilla tapa gran parte de la cara hay que poner énfasis en la frente y los ojos, que son lo que se puede ver", explicó el fonoaudiólogo, quien añadió que "me he encontrado con gente que se está riendo o sonriendo y uno no tiene idea".

5 Tener una buena higiene vocal. Inostroza explicó que esto se refiere a una correcta higiene de las cuerdas vocales, manteniéndolas hidratadas bebiendo pequeños sorbos de agua durante el día y evitando consumir diuréticos como café, té, mate y alcohol. También se aconseja evitar el consumo de cigarrillos o sustancias que se fumen, no gritar y no imitar voces.

"Hay que recordar que la comunicación es un todo. Requiere de la voz, la gestualidad y la expresión facial.

Marcia Toloza, Pdta. colegio de fonoaudiólogos