ProCultura potencia vínculos con identidad y territorio
Fundación busca contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas y sus comunidades a través de iniciativas.
Redacción
Iniciativas como el Diagnóstico del estado de conservación del exJuzgado de Mejillones, el Archivo Fotográfico del Barrio Casa de Máquinas de Mejillones, dos programas del Ministerio de Vivienda y Urbanismo y un Programa de Mejoramiento de Fachadas para la Zona de Conservación Histórica Antofagasta, son los proyectos que ejecuta la Fundación ProCultura.
Presente en la región desde el 2022, el objetivo de la organización es contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas y sus comunidades, a través de iniciativas que los vinculen con su identidad y el territorio que habitan. Todo, considerando las necesidades o problemas a nivel local. "Si bien ejecutamos una gran diversidad de proyectos, todos tienen un hilo central que es la promoción del bienestar social, físico y mental de las personas y sus comunidades. Al poner en el centro el bienestar de las personas, nuestro trabajo cobra sentido", aseguró su director regional, Pablo López.
Diagnóstico
El equipo local está conformado por 20 personas que habilitaron su sede para facilitar su labor y vincularse con la comunidad, lo que ha permitido tener un diagnóstico regional respecto a sus áreas de trabajo. "Sabemos que la región tiene un enorme potencial de desarrollo, pero para avanzar es necesario que los distintos actores nos comprometamos para empujar hacia un desarrollo que sea sostenible. Antofagasta, además, es una región que tiene mucho patrimonio cultural material e inmaterial y también patrimonio natural. Sin embargo, la cultura y el patrimonio son ámbitos que muchas veces son olvidados, porque no se alcanza a visualizar el impacto que tiene en las personas", indicó el director.
Para López, lo anterior hace necesario ampliar la mirada y comprender que invertir en cultura, en la protección y puesta en valor del patrimonio, es proteger resguardar la historia y preservarla para las nuevas generaciones.
"Restaurar una iglesia no es importante sólo por un tema de seguridad o por su valor arquitectónico, es importante porque esa iglesia juega un rol en la vida espiritual de una comunidad, porque ha sido testigo de hechos significativos. Pintar murales en una villa vulnerable, no es solo darle color a las casas, es una oportunidad para recuperar espacios públicos, para que las personas que ahí viven lo hagan en un ambiente más amigable, más atractivo y más seguro. Es una oportunidad para consolidar el tejido social", afirmó.
Proyectos
Entre los proyectos que ejecuta la fundación en la zona destaca el archivo fotográfico Casa de Máquinas de Mejillones, en colaboración con el Programa Minvu Quiero Mi Barrio, la Municipalidad de Mejillones y una empresa privada.
"A través de la recopilación de fotografías antiguas y de encuentros en que las mismas personas nos cuentan la historia de las fotos. Creamos un gran álbum fotográfico digital que relata la historia de la comuna, pone en valor a los vecinos y vecinas que por ejemplo, participaron en la construcción de algún inmueble significativo, realizaron oficios que permitieron el desarrollo económico y social, que mantuvieron vivas las tradiciones o las iniciaron, en fin. Es un proyecto que busca, sobre todo, reconocer a las personas y su impacto en la historia de su barrio, de su comuna. Es conmovedor, cuando una vez finalizado el proyecto, las personas van a la exposición y se ven, porque se descubren a sí mismas como protagonistas de la historia", detalló López.
La inversión aproximada del conjunto de iniciativas que impulsa ProCultura llega a cerca de mil millones de pesos.
La Estrella de Antofagasta


