Boric por acuerdo: "El pueblo de Chile nos ha dado una segunda oportunidad"
El Presidente llamó a "estar a la altura, aprendiendo de las experiencias presentes" y dijo que confía en "la buena fe" de los expertos. En tanto, el Servel indicó que el proceso podría retrasarse, pues "armar un padrón no es de un día para otro".
Matías Gatica Lindsay
El Presidente Gabriel Boric valoró ayer el acuerdo constitucional conseguido por los partidos políticos la noche del lunes. Si bien el mandatario cree que "el pueblo de Chile nos ha dado una segunda oportunidad", agregó que "tenemos el deber de estar a la altura, aprendiendo de las experiencias presentes".
La mañana de ayer los presidentes de la Cámara de Diputados y del Senado, Vlado Mirosevic y Álvaro Elizalde, respectivamente, acudieron al Palacio de La Moneda, donde se reunieron con el jefe de Estado, quien tras haber pedido la semana pasada que se aceleraran las negociaciones para llegar a un acuerdo constitucional expresó su satisfacción por el consenso logrado por los 14 partidos y tres movimientos que participaron en las conversaciones.
"Chile no puede seguir esperando (...) Luego de varias semanas de conversaciones, intensas, ásperas en algunos momentos, las fuerzas políticas han alcanzado un acuerdo que le han devuelto al país la posibilidad de tener una nueva Constitución que nos proyecte hacia el futuro. Hemos dado un paso necesario y espero decisivo para avanzar en un nuevo pacto social por una mejor democracia, de más libertadores, de mejores derechos sociales", dijo Boric.
Sobre el "Acuerdo por Chile", que contará con un Consejo Constitucional de 50 miembros electos y 24 expertos designados por el Parlamento, ambos grupos regidos bajo la paridad de género, el jefe de Estado valoró que los primeros fueran 100% electos y añadió que "los expertos van a cumplir un rol de asesoría y acompañamiento, en donde confío en la buena fe para arribar a acuerdos".
"El Gobierno mantendrá un rol de colaboración y facilitación del proceso, pero la responsabilidad para concretarlo lo tienen los parlamentarios", dijo el mandatario.
Álvaro Elizalde (PS) confirmó que en los próximos días se redactará "el proyecto de reforma constitucional que habilita el proceso constituyente y que materializa el acuerdo" y agregó que "creo que va a haber mayoría en ambas Cámaras para su aprobación". Para ello requiere el voto de 89 diputados y 29 senadores.
Sobre los 24 expertos que redactarán el anteproyecto y acompañarán el proceso, el presidente de la Cámara, Vlado Mirosevic, informó que "no van a recibir remuneración, se trata de personas que porque tienen un compromiso incondicional con el país van a servir a Chile a través de esta instancia" y llamó a los partidos a "poner la mejor gente disponible que tiene este país para hacer una Constitución que represente a todos y a todas (...) Elijan con responsabilidad, pensando en los próximos 40 años de Chile".
Atraso de elcciones
Si bien Álvaro Elizalde dijo que en enero de 2023 comenzarían a trabajar los expertos y en abril próximo se llamaría a elecciones para definir a los miembros del Consejo Constitucional, el presidente del Servel, Andrés Tagle, sostuvo que puede que no se cumplan los plazos de las elecciones en abril.
"Entre el acuerdo y la ley o reforma constitucional hubo plazos casi de mes y medio. Ahora si se repite esto y sobre todo con la complicación de las fiestas de fin de año, puede ser lento y en ese caso puede que no se llegue a abril por los plazos", dijo el jefe del ente elector.
Tagle añadió que no le ve "mayor problema en que el mismo calendario sea en mayo la elección de los consejeros y el plebiscito (originalmente pensado para noviembre) sea en diciembre (...) Armar un padrón no es de un día para otro".
La diputada Camila Flores, militante de Renovación Nacional, partido que adscribió al acuerdo, se mostró contraria a la decisión y recordó la propuesta de constitución rechazada el 4 de septiembre. "No estoy disponible para cometer el mismo error dos veces, errores que la ciudadanía ha rechazado", dijo.
Por su parte, el diputado Hernán Palma, del Partido Humanista, colectividad que no se sumó al acuerdo, llegó ayer al Congreso en Valparaíso vestido de chef en alusión a lo que llamó "cocina política" que permitió llegar al consenso por una nueva constitución. "Yo creo que lo histriónico no tiene nada de malo, es una forma lúdica y no violenta" de mostrar el descontento", expresó el parlamentario.