Ricardo Muñoz E./Redacción

El Very Large Telescope (VLT y cuya traducción es telescopio muy grande), ubicado en Cerro Paranal y al sur de Antofagasta, tiene un largo historial de descubrimientos e hitos astronómicos gracias a su avanzada tecnología.

Y si ya este observatorio ha permitido grandes logros, ahora aumentará su capacidad en 10 veces, por lo que permitirá incrementar su potencia para captar simultáneamente los objetos del Universo. La doctora en Astrofísica y Cosmología de la Universidad de Madrid, Amelia Bayo y quien se ha desempeñado en la Universidad de Valparaíso, será la encargada del dispositivo que permitirá esta mejora en el VLT.

En concreto, el sofisticado instrumento permitirá el cambio de captación de cientos a miles de estrellas a la vez, para lo cual estará formado por mil minirobots que manipulan fibras y con una precisión de la décima parte de un cabello humano.

Bayo comenta que esto permitirá determinar la composición química de las estrellas que ayudaron a conformar nuestra galaxia, la Vía Láctea, lo cual es conocido como "arqueología galáctica".

Por lo tanto, será posible observar la trayectoria de miles de objetos que se mueven en el Universo y calcular si es que estos se están acercando y si es así a qué velocidad. Además, también se suma el estudio de cúmulos de galaxias y saber cómo la materia se ido transformando.

"Saber cómo otros sistemas solares, otros sistemas estelares, otras galaxias, se han formado, nos permite poner en perspectiva nuestra posición en el universo. Nos desafía a hacernos preguntas grandes, que escapan a lo palpable y lo que fácilmente podemos imaginarnos. Es impresionante que siquiera uno pueda decir esto ¡Somos la nada misma y estamos tratando de ponernos en perspectiva respecto del Universo! Creo que eso es súper importante y es único del ser humano", comentó la científica en entrevista con el portal de noticias El Mostrador.cl.

Pero este tipo de tecnología no sólo es utilizada para efectos del estudio astronómico, ya que también sus aplicaciones se están aprovechando en campos para el desarrollo de la robótica y su uso en la medicina.

La científica recientemente fue incorporada al Programa de Frontera de la Academia Chilena de Ciencias, el cual está destinado a entregar apoyo a investigadores jóvenes que busca sobrepasar con su trabajo los límites del conocimiento tradicional.

La doctora Bayo actualmente se encuentra en Alemania desempeñándose en el Observatorio Europeo Austral (ESO, grupo científico propietario del VLT) y señala que la última etapa de la misión se ha vuelto "frenética", debido a que corresponde al término de un proyecto que viene con varios de años de preparación, algo natural en el desarrollo de recursos de alta complejidad en astronomía.

En cuanto a su biografía, Bayo es de Málaga y se licenció en matemáticas, para posteriormente cursar su magíster y obtener su doctorado en astrofísica y cosmología. Cursando ese doctorado llegó a Chile para trabajar en el observatorio La Silla, Región de Coquimbo.

"Me quedé dos semanas, con mi cero plata, como estudiante, con mi mochila, yéndome hacia el norte, y me enamoré de todo. De los cielos, de la gente, de la naturaleza. Y decidí que quería volver a Chile", comentó al mencionado sitio.

Una vez que finalizó el doctorado postuló a ESO en Chile, donde vivió durante tres años en Santiago, para luego regresar a Europa. No obstante, se había percatado que en Chile se debía trabajar más en la creación de instrumentos, para lo cual se decidió contribuir a ello a través de una vacante disponible en las Universidad de Valparaíso.

"Chile estará mucho más presente en el desarrollo tecnológico, que tiene que ver con la explotación de los recursos naturales. Y eso no solo en astronomía. En un buen balance con la conservación, que es súper importante. Eso porque yo soy muy idealista. Es lo que me imagino y que espero que pase y sé que hay mucha gente trabajando para eso", comentó la doctora en astrofísica.

120 kilómetros al sur de Antofagasta se encuentra el VLT, en la cima de Cerro Paranal.