Sedentarismo infantil y espacios públicos

Señor director:

Un estudio publicado recientemente por la OMS, reveló una seria realidad que afecta directamente a niños, niñas y adolescentes, pero significa un desafío para toda la comunidad.

La investigación analizó la evolución desde 2001 a 2016 de 1,6 millones de niños, niñas y jóvenes que van al colegio en 145 diferentes países y territorios, la cual concluyó que el 80% de encuestados no realiza la actividad diaria mínima necesaria para un cuerpo saludable. No se trata sólo de hacer deporte, sino que aborda acciones básicas, como caminar o jugar al aire libre.

Para complementar estas cifras, el nuevo Mapa Nutricional de la Junaeb 2020, publicado este año, indicó un aumento de la obesidad nunca visto, alcanzando un 54% de la población pediátrica y un especial aumento en la obesidad severa, con una prevalencia del 7,6%, es decir, más de la mitad de nuestros niños y niñas sufre de obesidad.

Una serie de factores pueden estar influyendo en el aumento en los problemas de peso y de salud en niños, niñas y adolescentes. Los padres o cuidadores trabajan y no hay nadie que salga con los niños al parque. Deterioro de la dieta con productos ultraprocesados y cantidades peligrosas de sodio y azúcar. Además de menos espacios públicos seguros para que niños y niñas puedan jugar, ya sea por su cuenta o acompañados.

Las áreas verdes urbanas son un elemento importante para el desarrollo y la calidad de vida que repercute directamente en la salud de las personas, sin embargo, el acceso a parques y plazas es muy desigual.

Al analizar estas circunstancias se observa una relación estrecha entre vulnerabilidad y obesidad, que generará graves consecuencias en la salud, educación, autoestima y finalmente en el bienestar de las familias y la sociedad en general, en el mediano y largo plazo.

Trabajar en la generación de planes integrales que contemplen: desarrollo urbano equitativo, deporte, alimentación saludable y mayor seguridad, son esenciales para evitar un problema sanitario sin precedentes una vez que esta población llegue a la adultez con una serie de enfermedades crónicas debido al sobrepeso, que pueden ser deficiencias cardiacas, hipertensión y diabetes, sólo por nombrar algunas. Estamos todos invitados a aportar a cambiar esta realidad.

Alejandra Fuenzalida,

directora ejecutiva

United Way Chile