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Residentes de calle 21 de Mayo instalaron este letrero en una jardinera, a fin que la comunidad tome conciencia y no ocupe estos espacios como basureros. Así se promueve una ciudad limpia.
Residentes de calle 21 de Mayo instalaron este letrero en una jardinera, a fin que la comunidad tome conciencia y no ocupe estos espacios como basureros. Así se promueve una ciudad limpia.
Ya es bastante indignante que muchas personas no tengan conciencia sobre la limpieza de la ciudad y después todos reclaman acerca de cómo está cochino Tocopilla. La foto fue tomada en Riveros con 18 de Septiembre.
Señor director:
La Organización Mundial de la Salud define el maltrato a las personas mayores como un acto único o repetido que causa daño o sufrimiento a una persona de edad o la falta de medidas apropiadas para evitarlos y que se producen en una relación basada en la confianza.
Constituye una violación a los Derechos Humanos e incluye el maltrato físico, psicológico, sexual y emocional, además de la violencia o abusos por razones económicas y materiales, junto con el abandono, la negligencia, el menoscabo a la dignidad y la falta de respeto.
En su mayoría es la familia y los seres más cercanos quienes mayormente maltratan al adulto mayor y frecuentemente podemos observar desde el entorno cercano el abuso físico, psicológico y el patrimonial, ya sea de parte de un familiar o cuidador del adulto mayor involucrado.
Otro agente que comete actos de maltrato o violencia hacia los adultos mayores son quienes ejercen su cuidado en instituciones o residencias.
De hecho, la OMS señala que las tasas de maltrato a personas mayores son muy altas a nivel global, tanto en instituciones como residencias de ancianos y centros de atención de larga duración. Dos de cada tres trabajadores de estas instituciones indican haber infringido malos tratos en el último año a un adulto mayor.
Y una de cada seis personas mayores de 60 años sufrió algún tipo de abuso en entornos comunitarios.
No hay que olvidar el maltrato del entorno social, es decir, cuando la sociedad abandona a un adulto mayor en cuanto a su soporte económico, social y de salud, dejándolo sin las garantías mínimas para su subsistencia.
Entregamos las siguientes recomendaciones para la prevención de estos malos actos:
- Realizar campañas de sensibilización dirigidas a toda la sociedad y que los medios de comunicación recojan testimonios de los adultos mayores respecto a lo que significa ser una persona mayor en Chile.
- Impulsar programas intergeneracionales en los establecimientos educacionales a nivel escolar, donde pueda haber una convivencia entre las generaciones y no exista un abismo o distanciamiento entre la niñez, adolescencia, juventud y etapa de adulto mayor
- Detectar precozmente a posibles víctimas y agresores a través del sistema de salud y los municipios que tienen clubes de adultos mayores.
- Intervenciones de apoyo y capacitación para los cuidadores ya sean formales o informales, porque se trata de un trabajo estresante y expuesto a mucha fatiga.
María Rhode Durán,
académica Facultad de Psicología Universidad San Sebastián