Las críticas a Guardiola tras perder la Champions
El entrenador no gana la "Orejona" desde su etapa en el Barcelona.
Deportes - La Estrella
El entrenador Pep Guardiola no pudo conquistar la Champions. Su Manchester City perdió la final 1-0 contra el Chelsea, que se llevó la "Orejona" gracias al gol de Kai Havertz, en el minuto 42'.
El catalán llegó el 2016 a los "ciudadanos" para reemplazar a Manuel Pellegrini. El objetivo era ganar todos los títulos y por eso invirtió 623 millones de euros. A nivel local ha respondido. Ganó tres veces la Premier League, cuatro la Copa de la Liga, cuatro la Community Shield y una FA Cup. Sin embargo, se le resiste el éxito continental.
Este año por primera vez entró a una semifinal de Champions con el City. Luego vino la final, lo que nunca logró en sus tres campañas con el Bayern Munich. Guardiola registras dos Champions en su palmarés. Las dos con el Barcelona y Lionel Messi: en 2009 y en 2011. Ha pasado una década.
"Enfrente había un equipo trabajado, físicamente portentoso, punzante con espacios y ordenado a la hora de defender en bloque bajo. Y con un tal Kanté, claro. Un tipo indescriptible. Indescifrable. Un híbrido capaz de hacerlo bien en cualquier faceta. Un corrector, un lanzador, un conductor, un pulmón. El desenlace fue cruel para Pep y para el City", escribió el diario Sport.
Las palabras del citado diario fueron benévolas. Pero también hubo críticas fuertes. Guardiola no puso a ninguno de sus volantes centrales en el once inicial y salió a jugar con un Raheem Sterling lejos de su mejor forma.
El equipo, además, casi no se generó situaciones de gol. No hubo ninguna gran atajada del golero del Chelsea.
"Volvió a caer contra Tuchel, que le ha derrotado ¡tres partidos seguidos!. El dato es extraordinario. Sucumbió contra un equipo de 'atletas' y futbolistas dirigidos por el gran Thomas, al que no superó ni con su nuevo invento en la alineación. Guardiola ha ganado dos Copas de Europa, pero hace tiempo en Europa le acaban tirando de las orejas cada año", expresó Marca.
"Guardiola sorprendió con su alineación inicial antes del gran partido y, una vez más, su extraño experimento salió horrible, terriblemente mal. Las cejas se enarcaron con Fernandinho y Rodri, que se quedaron en el banco, lo que significa que el City comenzó el partido sin un mediocampista. Y fue un grave error de juicio… con hombres clave del City como De Bruyne fuera de su posición. El catalán tiene la culpa de la desilusión de la final", agregó The Mirror.
The Sun siguió en la misma línea: "Pep Guardiola cruzó esa delgada línea entre la genialidad y la locura y decidió que una final de la Champions era el momento para realizar uno de sus experimentos de profesor loco. El gran alquimista del City terminó inventando sólo una bomba fétida cuando un City sin un centrocampista defensivo ni un delantero fue superado por completo".
Daily Mail destacó que el once "rozó lo ridículamente imprudente", y BBC habló de una "táctica que fracasó y un plan de juego confuso".