Foto denuncia: ACERA INCONCLUSA
La acera de calle Santa Rosa, justo frente al Hospital Marcos Macuada, es un dolor de cabeza para los transeúntes, sobre todo adultos mayores, ya que no hay pavimentación. Urge que arreglen dicho tramo.
La acera de calle Santa Rosa, justo frente al Hospital Marcos Macuada, es un dolor de cabeza para los transeúntes, sobre todo adultos mayores, ya que no hay pavimentación. Urge que arreglen dicho tramo.
Señor director:
Es una realidad que en general el estilo de vida moderno promueve la inactividad física y sedentarismo, lo cual, se ha intensificado por el distanciamiento social y las cuarentenas destinadas a reducir la propagación de Covid-19.
Esto representa un desafío importante para mantenernos físicamente activos y prevenir síntomas dolorosos musculoesqueléticos.
Al iniciar un programa de actividad física en medio de la pandemia, las recomendaciones de salud pública para el distanciamiento social e higiene son primordiales. La reducción del sedentarismo se logra fácilmente evitando estar sentado prolongadamente, realizando pausas breves con movimientos generales, sesiones de ejercicio on-line y/o utilizando aplicaciones para fomentar el movimiento.
Algunos ejemplos de ejercicios que no requieren grandes espacios o equipos son: caminar, subir escaleras, levantar y cargar alimentos, sentadillas en silla, flexiones de brazos, abdominales, saltar la cuerda, yoga, pilates y tai chi. Un programa de ejercicio inicial debe comenzar con intensidades bajas a tolerancia durante períodos cortos y progresar lentamente a una AF más intensa o períodos de mayor duración.
Un objetivo de cualquier programa de ejercicio inicial es trabajar progresivamente para completar al menos 30 minutos de actividad moderada todos los días o al menos veinte minutos de una vigorosa cada dos días de la semana. Idealmente, incluir ejercicios de fortalecimiento de los principales grupos musculares al menos dos veces por semana. Las recomendaciones para niños y adolescentes son al menos 60 minutos de actividad física diaria de intensidad moderada/vigorosa. Respecto de personas susceptibles a enfermedades crónicas (cardiovasculares o pulmonares) es recomendable la búsqueda de asistencia profesional para la realización de ejercicio físico. En caso de síntomas como fiebre, tos, dificultad para respirar debe suspenderse inmediatamente y buscar asistencia médica.
Si las personas realizan actividad física regularmente y desean mejorar aún más su condición física, comenzar repentinamente un programa de entrenamiento intenso o prolongado no habitual no es recomendable, ya que es posible inducir una reducción de la función inmunológica. Por lo tanto, similarmente es sugerido adaptar la programación de ejercicios de manera lenta y progresiva.
Francisco Guede Rojas
académico Escuela de Kinesiología
UNAB Concepción