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Carrera
La "Carrera de la Muerte" se ha convertido en toda una tradición en la comuna y en una de las actividades más esperadas del festival "Acción, Arte y Cultura" que organiza la agrupación Rincón del Payaso.
La "Carrera de la Muerte" se ha convertido en toda una tradición en la comuna y en una de las actividades más esperadas del festival "Acción, Arte y Cultura" que organiza la agrupación Rincón del Payaso.
Es habitual que después del fin de semana las playas amanezcan llenas de basura, en especial de colillas de cigarro, botellas de licor y vasos plásticos que sirven para el carrete de fin de semana. Triste postal.
Estimado director:
El comunicado decía, el Hotel O'Higgins de Viña del Mar cierra indefinidamente, a raíz de los graves daños que sufrió en la previa de la primera jornada del festival.
El Hotel O'Higgins ha sido por años, el centro neurálgico del Festival de Viña, alojando a la gran mayoría de los artistas invitados, la realización de programas como ¡Aquí Hotel O'Higgins!, la elección de la reina, el esperado "piscinazo", las eternas esperas de los fans en sus puertas para ver a sus artistas preferidos, etcétera.
Hace un tiempo, al aumentar la oferta hotelera en la ciudad jardín, el Hotel O'Higgins fue disminuyendo su protagonismo, la TV dejó de hacer "Aquí Hotel O'Higgins", pero sí mantuvo con el auspicio de La Cuarta, la elección de reyes y el "piscinazo".
Sin lugar a ninguna duda, los tiempos cambian, llegan nuevas modas, nueva música y el progreso hotelero hace lo suyo. Qué mejor que tener vista directa al mar, y tantas otras cosas más, podían poner en riesgo el protagonismo del Hotel O'Higgins durante el Festival de Viña, pero nadie, ni el más imaginativo de los directores de cine, pudo imaginarse que el Hotel O'Higgins, el Hotel del Festival del Viña, cerraría sus puertas indefinidamente al ser atacado con piedras y objetos contundentes y además para poner la nota más dramática, nada más y nada menos, que en vísperas de realizarse la primera noche del festival.
Simplemente, el único final que lejos no se merecía el Hotel O'Higgins por su historia y que nadie se pudo imaginar.
Ojalá, más pronto que tarde, el título que le puse a mi columna no se transforme en ¡Aquí estuvo el Hotel O'Higgins!, y quede al igual que otros tantos lugares de nuestro Chile bajo cerros de piedras o convertidos en cenizas.
Podremos estar de acuerdo o no políticamente con la alcaldesa Virginia Reginato, pero su llamado a detener la violencia, ahora ya, también pasó a formar parte de las demandas urgentes de los chilenos.
Ojalá por Viña del Mar, por sus tradiciones, muy pronto escuchemos... ¡Aquí Hotel O'Higgins!
Luis Enrique Soler Milla