Cartas
50 años
Estimado director:
Y pensar que durante más de 50 años los chilenos estuvieron celebrando el tercer lugar que obtuvo la selección chilena en el Mundial de 1962. Homenajes, premios y más recuerdos, pero resulta que hoy, después de ganar seguidas las copas América y Centenario, no hay mucho ánimo por parte de nuestro equipo y también de parte de la hinchada, en especial la más joven, para disputar con la otrora triunfadora de siempre Argentina el tercer lugar de la Copa América que se disputa en Brasil.
Los mismos que "sufrieron el fútbol", salvo contadas excepciones, por los mismos últimos cincuenta años, jugadores e hinchas, antes de la llegada de los triunfos y cambio de mentalidad de Bielsa, tienen que estar muy de acuerdo que hubiesen firmado en su momento el tercer puesto en una Copa América o un repechaje a un Mundial, con la cara llena de risa y total satisfacción antes de jugar. Solo basta con hacer un poco de memoria.
"Se aprende poco con la victoria, en cambio mucho con la derrota" (proverbio japonés).
Luis Enrique Soler Milla
Descarbonización
Señor director:
Quedan pocos meses para que Chile acoja la COP25, una cumbre del más alto nivel que contará con representantes de casi 200 países, y cuyo fin es revisar los avances y compromisos suscritos en el Acuerdo de París. Para Chile es un acontecimiento relevante, considerando que hace pocos meses obtuvimos el primer lugar del Ranking Mundial de Energías Renovables, y que recientemente, en el G20 de Japón, Chile lideró el compromiso de ser "carbono-neutral" para 2050.
En este sentido, la industria energética juega un rol clave, considerando que casi el 80% de las emisiones provienen de este sector, junto con transportes. Por este motivo, la tarea de descarbonizar es de todos, incluso de los pequeños generadores de energías renovables, conocidos como PMGD, y cuyo suministro puede ayudar a bajar hasta un 8,7% el aporte del carbón en la matriz.
Dado lo anterior, resulta paradójico que se esté evaluando modificar la forma de cálculo del precio estabilizado del Decreto Supremo 244 del 2005, sin que se haya realizado ningún estudio previo que justifique el cambio, pues justamente la existencia de este mecanismo hace viables a largo plazo a estos pequeños parques solares, que generan empleo regional y no requieren de los complejos procesos de aprobación ambiental.
Jorge Leal Saldivia