Día mundial sin tabaco

Hoy se celebra el Día Mundial Sin Tabaco y este año el lema de la Organización Mundial de la Salud es "el tabaco rompe corazones", para que las personas y los estados tomen conciencia del grave efecto del tabaquismo sobre el sistema cardiovascular. En Chile las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de mortalidad y discapacidad prematura. Un cigarrillo al día aumenta en más de un 50% el riesgo de tener un infarto al miocardio o un accidente cerebrovascular. Además, el tabaco tiene impacto enorme en las enfermedades respiratorias como la enfermedad pulmonar crónica y el cáncer pulmonar. Si bien Chile ha avanzado en las medidas propuestas por el Convenio Marco para el Control del Tabaco, un área muy deficitaria es el tratamiento de apoyo para dejar de fumar. En la gran mayoría de los casos, no se trata de falta de motivación por parte de los pacientes, sino de la abstinencia física, sicológica y social que aparece cuando intentan dejar de fumar. Dicha abstinencia tiene tratamiento y las intervenciones, tanto farmacológicas como no farmacológicas, son efectivas y están disponibles en Chile, pero pocas personas pueden acceder a ellas porque el sistema de salud no las cubre.

Francisco

Estimado director:

Cuando el obispo de Copiapó, el sacerdote Celestino Aós, uno de los obispos que puso su cargo a disposición del Papa Francisco, declara: "está la opción que elPapa Francisco nos cambie de diócesis", es para preocuparse. Si el Papa Francisco llegara a tomar esa opción, en pocas palabras todo lo visto, escuchado, declarado y solicitudes de perdón, el viaje del obispo Scicluna, etc., habrían sido inútiles. En palabras simples, sería una nueva versión del "chiste del sillón de don Otto", que en vez de sacar el sillón de su casa, lo cambia de pieza, para que no lo sigan engañando. Es de esperar que el Papa Francisco, antes de resolver se pregunte, ¿Qué habría hecho Cristo en mi lugar? Con toda seguridad entre las respuestas no estaría el cambiar a los renunciados obispos de diócesis.

Luis Enrique Soler Milla