Redacción

Al fin llegó a término para la actriz Demi Moore, el drama y disputas legales de un hecho policial ocurrido hace tres años de disputa, y sin saber qué ocurrió la madrugada del 19 de julio de 2015 en su casa. La actriz llegó a un acuerdo extrajudicial con la familia de un joven que falleció en su residencia. El trato pondría punto final a la disputa sobre la responsabilidad civil de la intérprete, la que no estaba presente cuando ocurrieron los hechos. En dicha instancia, la policía encontró el cuerpo sin vida de Edenilson Steve Valle, de 21 años, en la piscina del hogar de Moore ubicado en Beverly Hills, tras una fiesta en el lugar.

La celebración habría sido organizada por uno de los empleados de Demi, mansión que había quedado a cargo mientras ella se encontraba de viaje. Los invitados abandonaron la casa en un momento de la noche y al volver hallaron al joven flotando en la piscina. Según se dijo, Valle no sabía nadar y estaba alcoholizado, por lo que se presume que cayó accidentalmente al agua.

Tan pronto ocurrió la tragedia, emitió un comunicado, señalando que estaba "totalmente conmocionada. Estaba fuera del país viajando para reunirme con mis hijas para celebrar un cumpleaños cuando me dieron esta devastadora noticia. La pérdida de un hijo es una tragedia impensable y mi corazón está con la familia y amigos de este joven. Pido, por favor, respeto por la privacidad de todos los implicados en este momento delicado".

Los familiares de Edenilson, no obstante, llevaron a la corte a la estrella hollywoodense pese a no estar en su residencia la noche del deceso del hombre. También las emprendieron contra su asistente personal y una tercera persona responsable por la organización del evento. Los seres queridos pedían una indemnización por daños y perjuicios.

Reclamaron, además, que la fiesta no contaba con normas básicas de seguridad y sostuvieron que las piedras ubicadas al borde la piscina podrían haber sido las causantes de que el muchacho tropezara. El entuerto finalizó ayer, cuando se dieron a conocer los documentos judiciales que aclaraban el fin del proceso judicial, luego de que ambas partes llegaran a un acuerdo económico del que aún no ha trascendido el monto que Moore pagará.

La Estrella de Valparaíso

France Gall, una de las figuras icónicas de la canción francesa en las décadas de los 60 y 70, murió ayer domingo a los 70 años de edad en la capital gala, donde había sido hospitalizada por una infección severa.

"Hay palabras que no se querrían pronunciar nunca. France Gall ha ido al paraíso blanco después de haber desafiado durante dos años, con discreción y dignidad, la recaída de su cáncer", precisó en un comunicado Geneviève Salama, encargada de comunicaciones de la artista.

La cantante, que llevaba dos décadas retirada de la música, se llamaba Isabelle y nació el 9 de octubre de 1947 en París. Cambió ese nombre por el de France al inicio de su carrera, cuando la escena en Francia estaba dominada por Isabelle Aubret. Era la hija de Robert Gall, cantante y autor de canciones de éxito, entre otros para Edith Piaf, Charles Aznavour o Cécile Berthier.

Era la hija de Robert Gall, cantante y autor de canciones de éxito, entre otros para Edith Piaf, Charles Aznavour o Cécile Berthier.

Su padre puso interés para que empezara a practicar piano desde los 5 años y guitarra desde los 11. Cuando era adolescente le incitó a grabar temas que él mismo propuso al editor Denis Bourgeos en la primavera de 1963. En octubre de ese año, cuando acababa de cumplir 16 años, se empezó a escuchar su voz en la radio y su tema "Ne soit pas si bête" se alzó al puesto 44 de las mejores ventas.

Su director artístico de entonces le propuso a Serge Gainsbourg que compusiera para la joven promesa, lo que se materializó con "N'écoute pas les idoles", que consiguió situarse en cabeza de las listas musicales francesas en marzo de 1964.