El esfuerzo de una madre para sufragar
Era cerca del mediodía y Marcela estaba un poco complicada en este proceso eleccionario debido a que era su primera vez y más encima tenía que hacerlo en compañía de sus dos hijos.
Pero llegó hasta la mesa 6 de la escuela Arturo Prat y los vocales la atendieron súper bien, sobre todo por sus hijos Geishido y Maite, que producto de la espera podían volverse un poco inquietos.
Votación
Tras consultar su lugar de votación previamente en el centro de atención ubicado en el primer piso del establecimiento educacional, Marcela estaba lista para expresar su opinión.
Luego de recibir las papeletas entró con sus hijos a la cámara secreta, donde estuvo varios minutos intentando expresar su voto.
Pese a que Geishido estuvo un poco inquieto, como cualquier niño. Esta vecina pudo lograrlo sin problemas, entregando los votos sellados correctamente.
"Pensé que iba a ser un poco complicado y que habría mucha fila. Pero todo fue expedito", indicó la vecina, explicando que el ser madre no es un impedimento para poder ser parte de este momento histórico en nuestro país, donde en esta oportunidad quiso incluir a sus pequeños, quienes se portaron súper bien.