Redacción - La Estrella de Antofagasta
El 'entierro ecológico' llegó a Antofagasta de la mano de las ánforas biodegradables, una idea de la empresa española Urna Bios que comenzó a hacerse conocida en agosto del año pasado en Chile, pero que hace poco inicio su venta oficial en algunas funerarias de la capital regional.
Según explicó Claudia Jara, representante de Bio Ideas, empresa que distribuye a Urna Bios en el país, todo se trata de un concepto para "dar vida después de la vida, de dar árboles, los llamados pulmones del mundo. Va con todo un tema de reforestación y también para solucionar el problema de suelos que estamos viviendo en los cementerios de Chile. Esto es el futuro, creo que así vamos a terminar todos de aquí a 20 años más".
Jara también mencionó que es una opción muy requerida entre las personas, no tan sólo por la parte ecológica sino que también lo sentimental que esto implica.
"Con la urna biodegradable empiezas a ver crecer de nuevo, formas un lazo instantáneo, uno eterno (...) Estamos cambiando el concepto de lo que es la muerte, de un país que es súper religioso a algo que es más ecológico, nos damos cuenta que hay mucha gente que no quiere el sistema tradicional. Las cremaciones en nuestro país están aumentando y con esto das una historia a algo, das más vida".
La representante de Bio Ideas también comentó que el 70% de las ventas de las ánforas están destinadas a ser utilizadas con cenizas de humanos, mientras que el 30% lo hace con sus mascotas. "En cuanto a los animales, estas urnas tienen un gran impacto en los niños porque les dices 'mira hijo, tu perrito se fue al cielo, pero ahora va a crecer un arbolito', así el niño no se siente tan triste".
Para adquirir las urnas en Antofagasta y conocer cuáles son los puntos de distribución, los interesados deben comunicarse directamente a través del Facebook Ánforas Biodegradables Chile.
MODO DE IMPLEMENTACIÓN
La urna, al ser elaborada con cáscara de coco y celulosa, permite que no tenga fecha de caducidad. Está diseñada para facilitar el crecimiento de cualquier semilla en su interior, la que germina en una cápsula superior, separada de las cenizas. Una vez que empieza a biodegradarse, las raíces ya son lo suficientemente fuertes como para entrar en contacto con las cenizas. Con la biodegradación todo el conjunto se convierte en parte del subsuelo y así surge una nueva forma de vida.