Pablo Mamani Prado
Indignada y sorprendida se encuentra una pareja de nacionalidad peruana, ya que fueron acusados por vecinos de la Caleta Quebrada Honda por una presunta agresión, en medio de un altercado sobre la supuesta extracción de huiro ilegal.
Los hechos fueron presentados por este Diario en su edición de ayer, cuando una dirigenta sindical denunció que extranjeros estarían trabajando ilegalmente en el borde costero, pero que al ser encarados y grabados con una cámara, éstos la habrían agredido.
Réplica
Los ciudadanos extranjeros aclararon que esta situación, denunciada a la Fiscalía y PDI, ocurrió el viernes a las 17:30 horas, cuando esta pareja y su hijo estaban pernoctando en su automóvil a la orilla del mar en esta caleta.
Pero sorpresivamente llegó la dirigenta sindical en compañía de su marido, quienes habrían comenzado a insultarlos porque al lado del vehículo en el que andaban había huiro acumulado, reclamándoles que estarían extrayendo ilegalmente el recurso.
Ellos desmintieron esta versión, ya que no se dedicarían a este rubro.
Ambos bandos comenzaron a grabarse con cámaras y teléfonos celulares, donde la mujer habría golpeado a uno de los vecinos peruanos. Posteriormente la pareja de esta dirigenta, supuestamente habría sacado un arma de fuego y amenazado a estos extranjeros, quienes trataron de huir en su auto.
Todo continuó, según el relato del afectado, cuando la pobladora golpeó el vidrio de la puerta con una roca. Al rato llegó uno de los hijos de la mujer a bordo de un vehículo y supuestamente habría chocado el auto de los afectados, además de ocasionarle otros daños a la máquina.
Carabineros asistió al lugar, donde uno de los extranjeros fue detenido porque la otra persona lo denunció por agresión. Tras salir libre de la comisaría, a eso de las 01:00 horas, los ciudadanos peruanos hallaron destruidas dos cabañas que pertenecen a su familia en esta caleta y otra de un vecino. Además de denunciar el supuesto robo del auto de su hermano y de algunas especies.
Justicia
Los extranjeros, que viven hace 7 años en Chile de forma legal, explicaron que enviaron una solicitud de ayuda al Consulado Peruano en Chile para que pueda interceder en esta situación.
Ellos sólo quieren justicia y que los responsables paguen por estas agresiones y los destrozos de sus pertenencias. También quisieron aclarar que trabajan honradamente y no ilegalmente extrayendo huiro como sindicó la dirigenta.