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Nuevos alumnos forjan sueños en el Centro de Formación La Chimba

Una segunda generación de alumnos dio el vamos a sus capacitaciones en distintos rubros. Este lugar es el fruto del esfuerzo de los pobladores, cuyo proyecto es encabezado por el padre Felipe Berríos y la "Tía Chana".
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Los hombres, vestidos con overol, se encuentran todos reunidos. Unos toman apuntes, otros prestan atención al profesor. Más al fondo hay otro grupo concentrado en cada proceso de la soldadura al arco. Con sus implementos de seguridad no le pierden pista a la herramienta, que expele varias chispas cuando entra en contacto con el metal.

En otras secciones están ellas al pendiente de cada detalle en la costura a máquina, mientras que por el lado contrario una profesora explica a las mujeres todas las técnicas del lavado correcto del cabello.

Y pese a que son pasadas las 20:00 horas, el recinto está lleno. Es que la convocatoria del Centro de Formación en el campamento Luz Divina VI en La Chimba fue todo un éxito. Es en este lugar donde el sacerdote jesuita Felipe Berríos, comenzó a forjar el sueño de los que por sus propias manos eligieron salir de la pobreza.

En diciembre del año pasado se efectuó la ceremonia de certificación de la primera generación de alumnos.

Alrededor 50 personas, todas de campamentos aledaños y en su mayoría inmigrantes, comenzaron así a derribar las barreras de la pobreza a través de los estudios y el trabajo.

El nombre del Centro de Formación, levantado por Berríos y los pobladores del sector, estuvo en los ojos de la prensa, traspasando las fronteras de esta región e incluso del país.

La razón fue la presencia de Marcelo Bielsa, íntimo amigo del sacerdote y que sorprendiendo a todos llegó en persona hasta el recinto para ser testigo directo del gran paso que dieron estos vecinos.

Esta semana comenzó el capítulo dos de aquella aventura iniciada hace exactamente un año. Un nuevo grupo ha llegado con el anhelo de aprender.

Corte y confección, carpintería, peluquería, soldadura, electricidad, son algunos de los rubros que pueden aprender los alumnos. Este año la principal novedad es la alfabetización digital, ya que la idea es entregar una ventana de acceder a un computador y al mundo del internet, para aquellos que no tienen la oportunidad.

Son 60 los nuevos alumnos que llegaron este año para la capacitación entre las 19:00 y las 22:00 horas, pero Berríos nos añade que otras 30 personas asisten dos veces a la semana a otros cursos.

En total, 90 pobladores que vienen de varios campamentos y otros sectores, donde el 97% de ellos proceden del extranjero.

Colombianos, bolivianos, ecuatorianos y peruanos, se dan cita diariamente en estas instalaciones.

"Estamos muy contentos. Los primeros días tuvimos un 100% de asistencia, así que estamos con mucho entusiasmo", dice el sacerdote, mientras sale de su oficina hacia el centro del salón, en donde se pueden ver cómo están trabajando los distintos profesores.

Centro de formación

Al lado del jesuita está su brazo derecho. Susana Véliz desde siempre ha trabajado con él. La "Tía Chana", como le conocen en el Campamento La Chimba, es la directora de este centro de formación.

La mujer nos lleva curso por curso, para ver cómo están trabajando los alumnos. Tal como lo dijo anteriormente Berríos: en este lugar todo funciona de manera ordenada.

Los profesores cuentan con sus respectivos contratos y la energía eléctrica también está regularizada.

Susana Véliz nos dice que fue tanto el éxito del año pasado que incluso tienen varios interesados en una lista de espera, atentos a que se abra algún cupo para ser parte de alguno de los grupos de capacitación.

Entre risas, tanto el padre como Susana nos dicen que "Bielsa nos hizo publicidad".

En el ambiente hay un sentimiento de alegría por comenzar por segundo año consecutivo este proceso que se extenderá hasta diciembre, y con sus respectivas vacaciones de invierno.

"Es nuestra segunda generación y estábamos ansiosos de comenzar a trabajar, porque ya nos estaban preguntando cuándo comenzaban los cursos", dice la directora del centro.

Fue tanto el éxito de la primera generación que considerablemente aumentó el número de los interesados en ser parte de este nuevo proceso.

"Tenemos una lista de espera enorme. En la mayoría de los cursos se inscribieron más de 30 personas (originalmente para sólo 10 alumnos), así que ahí tenemos que empezar a verlo, pero está funcionando. Todos los cursos están completos".

Alumnos

Elena Vásquez fue una de las que se inscribió a tiempo. Ella no pierde detalle de lo que explica el profesor en el curso de gastronomía. Sabe que con esto, se puede abrir una ventana que le permita generar ingresos.

La vecina del Campamento Luz Divina VI, está bastante contenta. Incluso recalca que en su tierra natal -Perú-, no tenía una oportunidad como ésta.

"Es una experiencia muy bonita aprender. Imagínese, vamos a aprender gastronomía, repostería, cocteles... Yo estoy emocionada. Me siento agradecida de vivir aquí en La Chimba, de conocer al padre Felipe. Lo que trajo para acá es algo muy lindo, darle la oportunidad al extranjero. Nos da una opción de encontrar trabajo, es fenomenal", señala la mujer.

Por el costado está Nevil Preciado. El ecuatoriano, vestido con un overol azul, era uno de los que se encontraba tomando nota de cada palabra.

"Esto es muy bueno para las personas. Podemos aprender y defendernos en la vida. Nos da la oportunidad de con el trabajo poder salir adelante", añade, y luego regresa hasta con sus compañeros para seguir poniendo atención en los aspectos de la electricidad.

El 15 de diciembre será el cierre del año de trabajo para este centro, donde se espera una ceremonia similar a la del año pasado.

La inserción social es la máxima que motivó tanto al padre Berríos como a la "Tía Chana", a concentrar todos los esfuerzos en este centro.

La idea es que ellos, pobladores de campamentos y otros sectores, sean los que forjen con sus propias herramientas. La vía de la superación, para así demostrar que es posible comenzar poco a poco a eliminar esa palabra tan dolorosa para nuestra Sudamérica: la "pobreza".