Secciones

El joven médico que pinta murales en el centro de Calama

Franco Zapata, sintió que el muro lo llamaba y contactó a la presidenta de la junta de vecinos para que lo dejará pintar en ese espacio. Ahora quiere seguir pintando murallas en otros sectores de la ciudad.
E-mail Compartir

Karen Parra E.

Desde hace un par de meses, la muralla de la principal plaza de calle Chorrillos luce más colorida y con una pintura que a muchos loínos les llamó la atención.

La sorpresa fue saber que el artista de esta obra, era un joven médico del Hospital del Cobre, que decidió mostrar su arte en esta muralla.

El autor de esta pintura es Franco Zapata Pizarro, de 30 años de edad, quien desde el 2012, volvió a vivir a Calama. Él es nacido y criado en la Tierra de Sol y Cobre y dice tener un sentimiento importante con la ciudad que lo vio nacer.

Es por ello, que una vez que terminó sus estudios de medicina en Concepción, no dudó en regresar a esta tierra que acogió a su familia y donde mantiene los mejores recuerdos de su infancia.

Es por ello, que diariamente pasaba por esta calle y quiso plasmar una de las primeras pinturas que realizó, cuando apenas iniciaba en el arte de pintar.

Fue con sus propios recursos que pudo pintar el mural de Chorrillos y lo hizo feliz de la vida. Lo único que quería era darle vida a este sector.

Sus comienzos se dieron cuando estudiaba. Estaba en tercer año de la carrera y sintió la necesidad de expresar sentimientos. Su mejor aliado fue el arte. Desde ahí todo comenzó como amateur, pero con el paso del tiempo y también buscando en internet, pudo ir mejorando su técnica.

"Partió como algo de entretenimiento para matar el tiempo y de apoco fue tomando forma y con la necesidad de expresar emociones a través de mis dibujos de situaciones puntuales. Una persona bailando o una persona que dirige una orquesta, tratan de transmitir ciertas emociones que sienten personas en ciertas situaciones adecuadas. Yo partí sin ningún conocimiento previo de cómo hacerlo, nunca me enseñaron", contó Franco.

Fue mirando en internet cómo descubrió ciertas técnicas y también pudo establecer contacto con otros pintores de España, que lo ayudaron con tips para comenzar con el arte, que hoy lo tiene pintando murales y cuadros.

Sin embargo, no está completamente dedicado a esto, pues él trabaja en el Hospital del Cobre como medico general. Es en sus ratos libres que aprovecha de cumplir su mayor pasión.

"Cada vez le fui dedicando más tiempo a esto del dibujo. Algo que empezó de una hora diaria, después se transformó en dedicarle tres horas, después de hacerlo una vez al mes lo hice una vez a la semana, se hizo más frecuente como algo que tu sientes que es bacán. Te sientes bien con eso y sabes que lo estás haciendo bien", afirmó este joven médico.

La medicina

Una vez que salió de la enseñanza media se planteó la idea de estudiar medicina, no solo porque le gustaba sino que porque era considerada una de las carreras más difíciles.

"Me motivó la exigencia, el sentir que podía y tenía las capacidades para hacerlo. Decían que era una carrera difícil y que no todos podían, pero yo podía hacerlo. A lo mejor no entendía el sentido de ayudar a la gente o de como funcionan los los sistemas de salud. Lo aprendí en la carrera con el paso del tiempo", reconoció Franco.

Contó que una vez que se metió en el tema le tomó el gustito a trabajar en hospitales y pudo entender el sistema.

"Me metí en el tema, una vez cuando estuve adentro ya entendí como funcionaba el sistema, como funcionan los hospitales, como funcionan los consultorios y en realidad me agradó" dijo este talentoso artista.

Agregó que le gusta ser médico, pero que en sus tiempos libres los aprovecha para tener una vida normal. Tiene una polola, frecuenta y comparte con sus amigos y también le gusta andar en moto.

Dice ser un joven con muchas cosas que hacer después del trabajo y no le gusta ser de esos médicos que después de un trabajo se van a las consultas, para seguir trabajando.

"Me gusta trabajar en lo que hago, no es que yo trabaje de médico pensando en que podría haber sido artista. Lo disfruto a concho, pero también hasta cierto punto. No ocupo la totalidad de mi tiempo en eso. Entiendo que hay otras cosas que también son importantes", comentó este profesional de la salud.

Los proyectos

Actualmente, Franco tiene cerca de 30 cuadros, donde ha mezclado varias técnicas que ha ido aprendiendo.

Él recuerda con cariño cuando se motivó y realizó una pintura junto a otros artistas en el Centro de Arte Ojo del Desierto en el Parque José Saavedra. Fue una iniciativa propia donde se contactó con la Corporación de Cultura, para conseguir plasmar su arte en el parque de Los Lolos.

Después de esto, quedó con el gustito de seguir pintando en lugares públicos. Su objetivo es embellecer la ciudad con obras de arte que sean cercanos a la gente y que también puedan aportar a los sectores de Calama.

Su objetivo es seguir pintando murales, pero dijo tener un principal inconveniente, pues no cuenta con los espacios.

Franco se ofrece para pintar las murallas que la comunidad le proporcione y pese a que los materiales son algo caro, también está dispuesto a costearlos, con el sólo afán de mostrar lo que hace.

"Me gustaría hacer una exposición, de repente a la gente le gusta lo que yo estoy haciendo y les gustaría tener algo en su comunidad o en una junta vecinal. Quiero hacer algo público, no es tanto mostrar, sino ayudar a través del arte cambiar la percepción de Calama", acotó este médico pintor.

Dijo estar disponible para pintar murales y las personas que quieran cederles los espacios lo pueden contactar a través de su Instagram zapata_arte.

Este joven médico solo pinta por gusto y lo hace apoyado por su familia y también su polola. Franco está gozando de la vida con lo mejor que pudo descubrir y reconoce ser un amante del arte, desde el año que de manera autodidacta aprendió a pintar.