Foto denuncia: a tomar conciencia
Tocopilla abre el paso a la inclusión, pero hay "algunos" que todavía no entienden que hay estacionamientos para personas en situación de discapacidad y no lo respetan ¿Quién le pone el cascabel al gato?
Tocopilla abre el paso a la inclusión, pero hay "algunos" que todavía no entienden que hay estacionamientos para personas en situación de discapacidad y no lo respetan ¿Quién le pone el cascabel al gato?
Nuevamente personas desconocidas, al parecer de restoranes, han botado basura fuera de los contenedores en Barros Arana, detrás del Banco BCI. Hay que fiscalizar esta situación y multar a quien corresponda.
Estimado director:
Cuando el presidente de la Corte Suprema, Hugo Dolmestch, asegura que los jueces cumplieron con su deber y que sus trabajos están muy bien hechos, y por otra parte Gendarmería declara que de los 788 presos beneficiados con la libertad condicional, ellos no la recomendaban en 528 de ellos en el caso de la Quinta Región, claramente se está en un contrapunto.
Además, se debe considerar que por una parte, la Corte Suprema forma parte del Poder Judicial, órgano independiente del Estado y Gendarmería es dependiente del Ministerio de Justicia y a su vez del Poder Ejecutivo.
Si a lo anterior se agrega las opiniones de autoridades de Gobierno, como de la propia ministra de Justicia, de parlamentarios y otros, todos sorprendidos por la masiva liberación de personas para que sigan cumpliendo sus condenas en libertad.
Y a todo lo anterior se le agrega que antes de cumplir las 24 horas en libertad, uno de los liberados ya había incumplido su compromiso y volvió a delinquir, por lo que volvió a la prisión.
Todo lo anterior nos lleva a un escenario en que cada parte defiende sus atribuciones para ejercer sus funciones debidamente amparadas por las leyes, la gran pregunta que surge: ¿Existirán los debidos mecanismos en las instituciones que toman estas cruciales decisiones, para asumir, enfrentar y responder en el caso de provocarse una recaída masiva de los liberados en actos reñidos con las leyes, con los consabidos daños directos y colaterales en los ciudadanos?
Todo esto sumado al actual estado de la seguridad de las personas desde mucho antes esta masiva liberación.
Claramente el echarse la culpa mutuamente no ayuda a nadie, nuestra institucionalidad vigente define perfectamente los poderes y atribuciones de cada parte y esperemos que también el asumir los perjuicios y daños que se produzcan por las mismas decisiones, solo resta esperar que los beneficiados con las libertades aprecien la oportunidad y crucen a la vereda del frente y así cambiar de una vez sus vidas.
Luis Enrique Soler Milla