En la noche del lunes, personal del Cuerpo de Bomberos de Tocopilla tuvo que concurrir a un llamado de incendio de un contenedor en pleno centro de la ciudad.

Esta emergencia se suscitó en la intersección de las calles Prat con Washington, donde los "chicos buenos" encontraron que nuevamente un contenedor de basura fue quemado intencionalmente, situación que lamentablemente ya se ha hecho bastante repetitiva en la ciudad.

Tras varios minutos de trabajo, finalmente los voluntarios tocopillanos pudieron controlar las llamas.

Este problema se ha hecho rutinario, donde de vez en cuando los servicios de emergencia deben responder a llamados, donde muchas veces la culpa es de desconocidos, quienes solo por el afán de destruir el mobiliario público, incurren en estas acciones vandálicas.

Personal municipal realizó una visita de terreno, con el fin de recorrer varios espacios baldíos, casas en desuso y detectar vehículos abandonados ubicados en diferentes puntos del puerto.

El fin de este operativo se concentró además, en detectar focos de escombros en estos espacios que fueron intervenidos por el equipo de Aseo y Ornato a medida que se realizaba el recorrido.

A esto, se sumó la realización de notificaciones a los dueños de viviendas, espacios o vehículos, con el objetivo de que los dueños puedan regularizar en un plazo estipulado la limpieza, retiro o notificación al municipio del porqué de los estados deplorables de sus espacios.

Este operativo se suma a las fiscalizaciones de "Lunes de las multas", en donde un grupo de fiscalizadores municipales sale a recorrer las distintas viviendas particulares, empresas, y casas comerciales con el fin de notificar si infringen o no la Ley Municipal de Aseo y Ornato.

La iniciativa se repetirá en otras jornadas, para así conservar de mejor forma los espacios públicos.

El Departamento de Seguridad Ciudadana implementó hace un par de semanas su "Línea 800123950", número gratuita que funciona de lunes a viernes de 08:00 a 20:30 horas y se llama a la comunidad a utilizarlo con responsabilidad.

Cabe destacar que algunas de las funciones de este departamento son apoyar, fomentar e implementar medidas de prevención en materia de seguridad, cuyo objetivo final es el bienestar de la ciudadanía. También estar en coordinación con las demás entidades municipales y responder a llamados de auxilio a vecinos de la comuna ante eventos de emergencias y catástrofes, naturales o accidentales.

Está a disposición durante 12 horas al día, de lunes a viernes y los sábados hacen patrullajes.

Pablo Mamani Prado

Consternación se generó ayer en la ciudad, tras conocer la muerte del conocido emprendedor del Puerto Salitrero y promotor de la primera planta de revisión técnica en la ciudad, Juan Segundo Páez López.

Su deceso se produjo el lunes a las 23:00 horas, mientras se encontraba internado en el Hospital Marcos Macuada a raíz de un cáncer al páncreas, del cual venía luchando hace bastante tiempo.

En compañía de sus seres queridos más cercanos se produjo el fallecimiento de este vecino a los 74 años de edad, donde su partida caló hondo entre la comunidad tocopillana.

Esforzado trabajador

Juan Páez se casó con Olga Pelayo y de esa relación de 55 años de casados, nacieron cuatro hijos: Juan Carlos (fallecido hace 7 años), Lucy, Yanina y Esteban, quienes a su vez le entregaron a este vecino la satisfacción máxima de tener 14 nietos e igual número de bisnietos.

Según recordó su hijo menor Esteban, esta persona oriunda de Cabildo llegó cuando tenía 18 años de edad a Tocopilla y se caracterizó por trabajar arduamente para darle el bienestar a sus seres queridos.

Fue así como estudió la carrera de técnico mecánico y las ganas de salir adelante en la vida lo llevaron a formar su primer taller eléctrico en el sector del Estadio Municipal, para posteriormente ampliar su sueño a un taller mecánico con servicio de grúa en carreteras.

Pero en la década de 1980 cumplió su deseo y fue el primero en habilitar una planta de revisión técnica (la que sigue funcionando actualmente).

Un padre y esposo ejemplar, pero sobre todo un abuelo bastante cariñoso. Esos son los calificativos con que los hijos reconocen a Juan Páez López, quien falleció en la felicidad de haber brindado todo por su familia.

En vida, este emprendedor y tocopillano de corazón, tuvo el deseo de ser cremado a la hora de su muerte y esta petición será cumplida hoy a las 11:00 horas en la Parque San Cristóbal de Antofagasta.

74 años de edad tenía Juan Páez López, cuya muerte caló hondo entre la comunidad tocopillana.

1980 en esa década este emprendedor abrió la planta de revisión técnica, que sigue en funcionamiento.