Caleta Urco se levanta de la tragedia del aluvión
"Menos mal que el aluvión fue de día, ya que en la noche pudo haber sido mucho peor", asegura la vecina Inés Castillo Delgado de la Caleta Urco. Ello, tomando en cuenta que cinco viviendas destruidas y casi dos semanas si poder trabajar en el mar, es el saldo del devastador aluvión que azotó a los habitantes de este sector turístico, en el extremo norte de la Provincia de Tocopilla.
Pasadas las once de la mañana de ese fatídico 9 de agosto, la intensa lluvia hizo ceder una quebrada en el cerro que da justo frente a esta caleta, donde el barro devoró todo a su paso: cabañas, cocinas, muebles, pero ninguna vida humana.
"Cinco personas lo perdieron todo en esta catástrofe, pero afortunadamente no tenemos ninguna vida que lamentar. Solamente nos queda seguir adelante", aseguró Inés.
sin trabajo
Hace más de dos semanas que los muchachos del sindicato de pescadores, mariscadores y algueros de Caleta Urco no pueden trabajar en el mar, pese a que sus embarcaciones no sufrieron daño alguno.
Son más de 20 personas las que están con las ganas de salir adelante, de vender el poco huiro que lograron rescatar de la tragedia e ir por más, para así ganarse el sustento diario para sus familias, pero muchas veces los resultados del desastre los desmoralizan.
Los pobladores de Urco aseguran que ayuda han tenido bastante, mediante helicópteros de las Fuerzas Armadas, quienes les entregan víveres, ayuda médica y algo de compañía, ya que solo quedan 27 familias -de las 63 que actualmente residen en esta caleta- y debido a los cortes de camino, de alguna forma igual se sienten solitarios después del aluvión.
La mayoría de ellos se encuentran sin complicaciones médicas, sólo dos personas que tienen tuberculosis pero que están siendo controlados por personal del Hospital Marcos Macuada.
El miércoles se presentó una luz de esperanza, ya que las maquinarias de Vialidad lograron romper el bloqueo desde esa caleta hacia Iquique, donde algunos podrán viajar y adquirir productos de primera necesidad o simplemente escapar un poco de esta triste realidad, que se materializa con barro, tierra y piedras . Pero independiente de eso, los habitantes de Urco están más unidos que nunca. J
Por otro lado, Quebrada Honda (que se encuentra más al norte de Urco) no presentó problemas mayores por el temporal.
Según indicó Jorge Flores de la directiva de esta comunidad, no hubo daños mayores, solo algunos robos antes del aluvión, pero nada catastrófico.
El dirigente aseguró que ayuda les ha llegado en varias oportunidades, pero necesitan agua y útiles de aseo como el cloro, para desinfectar sus viviendas.
Aquí viven 70 personas y todas en excelente estado de salud.
Pablo Mamani Prado