Ximena Cantillana sufrió hace 6 meses la perdida más importante que pueda tener una madre, el fallecimiento de un hijo.

Javier Santibáñez de 13 años era el hijo de Cantillana y que por cosas de la vida fue diagnosticado con un tumor cerebral pero tras batallar varios años falleció en marzo de este año.

Lucha

El dolor ha sido parte de su vida, tanto de ella como de su hija Isidora. Los recuerdos de su angelito dan vueltas aún por su mente, quien no quiso cerrar su mente y comenzó a ayudar a otros padres que viven similar situación o batallan con un pequeño enfermo.

"Ha sido difícil, pero gracias a él me di cuenta que se puede seguir luchando y ayudar a mucha gente, ya que el proceso de un cáncer es muy solitario, tanto para el hijo como para el padre", comentó Ximena.

Es más, a un mes de la muerte de Javier, esta madre decidió regalar los remedios de su bebé a una fundación, donde dicho acto sería el puntapié inicial a una nueva actitud de ella frente a la vida.

Ayer a eso de las 10:00 horas en el aula hospitalaria del Hospital Regional de Antofagasta, Ximena junto con papis y colaboraciones externas realizaron el Día del Niño a los pequeños de pediatría, donde alrededor de 15 pacientes participaron de las diversas actividades organizadas.

La alegría y la diversión olvidaron por un rato los remedios y los terribles diagnósticos de los doctores.

Es más durante el evento se le vio muy contenta y entusiasmada entregando apoyo y buena onda a todos los presentes, tal como lo hubiese querido su hijo, quien fue muy regalón y solidario con las personas.

"Desde muy pequeño siempre dio sus cosas a los demás, en varias ocasiones regalaba sus juguetes o me pedía dinero para colaborar y es por esto que quiero hacer esto de realizar actividades a los niños en el hospital", aseguró Cantillana.

Es más junto con las funcionarias del recinto asistencial se ponen de acuerdo para armar eventos sorpresa y sacar un rato de la rutina a los pequeños pacientes.

Hace unos meses trajo materiales didácticos para los niños. Además buscará ayuda para mejorar un poco el ambiente y que este sea más ameno con los infantes, quienes deben luchar con remedios y diversos tratamientos.

Historia

Según esta mamita la historia de su pequeño comenzó en el 2010, cuando una caída en el colegio gatillaría todo, los vómitos y dolores de cabeza se intensificaron con el paso del tiempo, preocupando a Ximena quien de inmediato llevó a Javier al doctor.

Los resultados de inmediato fueron drásticos llevando a este lolo de 13 a cirugía al recinto asistencial de la Perla del Norte y trasladado a Santiago.

Ahí los doctores aseguraron que no volvería ser el mismo de antes, pero Ximena no se dio por vencida y luchó para salir adelante. Recuerda que los pasos para la recuperación post operación fueron lentos donde sólo escribía la letra jota y su primera palabra fue "Bicho".

A pesar que ella dio todo por su bebe, la enfermedad fue mayor y en marzo de este año falleció en sus brazos, donde Javier antes de partir levanta su pulgar en señal que estará bien.

De ahí en adelante Ximena Cantillana y su hija Isidora visitan de vez en cuando a los pequeños del hospital y aprovechan de hablar con los papás, en un comienzo esta labor fue como terapia, pero con el paso de los días ha sido una misión que le dejó su hijo y que ella con gusto ha seguido.

"Él fue muy solidario y debo seguir su legado, además él siempre estará presente en mí. Y que mejor terapia que compartir mi vivencia y colaborar con quienes lo necesitan", finalizó Ximena. J

A largo plazo esta antofagastina quiere formar una fundación en ayuda a los pequeños de pediatría del Hospital de Antofagasta. La cual contaría con actividades en el aula hospitalaria, celebrando así el Día del Niño, Navidad, cumpleaños y de pasada realizar juntas con los padres de estos pequeños y así compartir experiencias. Por su parte también gestionar apoyo económico y de remedios.

Manuel Chimaja Olguín