Abuelita estuvo una hora encerrada en un vehículo
Con impotencia fue conocido el caso de una abuelita de 92 años, quien permaneció por espacio de más de una hora encerrada en un vehículo.
El impactante hecho se registró la tarde del jueves en el sector de los estacionamientos del Mall Plaza Antofagasta- Balmaceda 2355 -, donde una mujer constató impactada que en una de las máquinas aparcadas había una persona de la tercera edad.
Esta correspondía a una mujer, identificada con las iniciales J.C.R.R. y domiciliada en San Pedro de Atacama, la que se encontraba sola al interior de un station wagon. Este, marca Nissan modelo Qashqai, estaba con sus vidrios cerrados en uno de los espacios destinados a vehículos con personas con discapacidad.
Carabineros fue informado del hecho, por lo que hasta el lugar se desplazó personal de la Tercera Comisaría, adoptando un procedimiento por vulneración de derechos y dando cuenta de ello al Juzgado de Familia.
Al sitio también acudieron voluntarios de Bomberos, debido a que no se podía abrir el vehículo.
Según se indicó, el hijo de la mujer, L.D.R.R. con domicilio en Calama, señaló que había ido a almorzar, dejando en el auto a su mamá. Esta fue atendida por personal paramédico, constatándose que se encontraba en buen estado de salud.
TESTIGOS
Según relató una testigo a "Primera Imagen", la anciana estuvo encerrada más de una hora y presentaba síntomas de deshidratación.
La mujer dijo que luego de una hora y media o talvez dos, "llegó el tipo, el dueño del vehículo, y como si nada. Nosotros le ofrecimos agüita; le pusimos tallas en la cara".
Según precisó, "no hablaba, porque habrá tenido unos 80, 90... no hablaba nada; si cuando yo le dije que si quería agüita movía la cabeza solamente, y la boca seca. Se notaba que estaba seca la boca".
Al dueño del station wagon- agregó - lo "llamaron por altoparlante. El caballero se demoró mucho en llegar y llegaron como si nada. No les importó que la abuelita estuviera ahí...encima dice que ella no se quiso bajar porque estaba durmiendo".
A su llegada, el hijo de la abuelita fue increpado. "Le gritaban que lo llevaran preso y una señora se lanzó sobre él y le pegó, afirmó. J