Sin actos ni menos con manifestaciones de celebración como en años anteriores, los trabajadores conmemorarán su día este viernes 1 de mayo en Antofagasta.
A cambio, y un día antes, trabajadores y dirigentes sindicales se reunirán en la capital regional para darle un último análisis al proyecto de la Reforma Laboral.
El presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (Cut) en Antofagasta, Roberto Sepúlveda, explicó que "no nos interesa salir a las calles a marchar ni tampoco celebrar, sino que los trabajadores conozcan en qué consiste y los alcances que tiene la Reforma Laboral".
Los nudos
Ello sumado a que la ministra del Trabajo, Javiera Blanco, ha recalcado que el Gobierno no está cerrado al diálogo sobre su propuesta, los trabajadores apuestan por desmenuzar y analizar en profundidad este proyecto que, a su juicio, tiene cuatro nudos aún por resolver en favor de los trabajadores.
Estos llamados nudos son la adaptabilidad o flexibilidad laboral, la negociación por rama en la que no hay ningún tipo de acuerdo entre gobierno y trabajadores, la derogación de los artículos que permiten desvincular a los trabajadores por necesidades de la empresa y la criminalización de los dirigentes sindicales.
Sepúlveda explicó que para este encuentro pasado mañana, al mediodía, en la sede la Cut, se han cursado invitaciones a trabajadores y dirigentes de todos los sindicales afiliados.
"Nos interesa presentar nuestro sentir porque la Reforma Laboral no es un proyecto de los trabajadores, sino del Gobierno que lo incluyó a pesar que no estaba en su programa. Nosotros apostábamos al cambio del Código del Trabajo que fue instalado durante la dictadura y que es regresivo para los trabajadores", expresó el dirigente sindical.
Agregó que quieren que la reforma laboral incluya sus peticiones para un trato más igualitario.J
l El 1 de mayo es celebrado como el Día del Trabajador en homenaje a los mártires de Chicago, trabajadores anarquistas ejecutados por su participación en jornadas de protestas iniciadas el 1 de mayo de 1886 y que finalizaron abruptamente el 4 de ese mes en Estados Unidos.
En aquella oportunidad, los trabajadores lucharon porque se implementara la ley que imponía a los patronos respetar jornadas laborales de 8 horas diarias, bajo la consigna "ocho horas para el trabajo, ocho horas para el sueño y ocho horas para la casa".
l Lorena Pereira Molina