Un día normal de trabajo tenían hasta este lunes los profesores del colegio Don Bosco. Ya cerrado el año escolar, estaban dedicados a sus tareas administrativas antes de las vacaciones del verano. Sin embargo, a quince de ellos les avisaron ese día que no continuarían más trabajando en el establecimiento educacional.

Verónica Lagos, profesora y dirigente del sindicato del Don Bosco, quedó impresionada con lo sucedido. "Nos enteramos en el mismo momento, cuando iban pasando las personas a una oficina con su carta de despido", dice. Según sus palabras, fueron poco claras las razones del cese de contrato. "Nos dijeron que eran necesidades de la empresa, ninguna otra argumentación", cuenta.

A su juicio, detrás de esas razones hay otra más importante. "Lo que pasa es que nosotros formamos un sindicato en el mes de agosto. Sentimos impotencia, desconsuelo, frustración. Están vulnerando el derecho fundamental de organizarse sindicalmente", señala Lagos. De hecho, con los profesores desvinculados llegaron hasta la Inspección del Trabajo para formular una denuncia en contra del colegio Don Bosco.

Sin embargo, el rector del establecimiento, Gary Muñoz, se defiende. Dice que no hay nada de temas sindicales en la desvinculación de los funcionarios. "Fueron motivos académicos, de estructura y gestión. Fueron avisados como corresponde, se les comunica como cualquier otra empresa que quiera prescindir de su personal", dice. J