Mucho se habla que en Chile ya se instaló la tendencia 'pet friendly', esto es, que existen lugares y espacios a los que uno puede ir relajadamente con su mascota y que nadie te mira raro, muy por el contrario: las mascotas son más que bienvenidas.

Así, por ejemplo, en Europa no es poco común ver a personas comiendo en restaurantes mientras sus perros esperan con su correa. Así también, es normal en Estados Unidos que quienes van a un mall se les vea dentro de una tienda comprando un computador o ropa con su perro -y que no precisamente sea uno de raza diminuta-, quien espera en el suelo con correa.

Son parte de la familia

¿Pero esto en Chile pasa realmente? ¿Somos hoy un país pet friendly? Para mí la respuesta es un rotundo no. Es casi penoso cuando sale publicado en algún medio que un café en la punta del cerro acepta mascotas. Claro, en su terraza, lo que me parece más que lógico porque todos los lugares con terraza debiesen hacerlo. También, hace poco salió que una tienda del Barrio Italia era la primera que aceptaba mascotas y que se 'suma' a esta tendencia. ¡Es que no hay tendencia! Y ese es el problema con nuestro país, siempre está varios pasos más atrasados que las costumbres de las personas. Si ni Lollapalooza que es un festival masivo, al aire libre, supuestamente 'a la vanguardia' permite el ingreso de mascotas, y estamos hablando de un evento original de Estados Unidos. En su página web, las mascotas están dentro de los 'elementos' prohibidos. Entonces, ¿qué nos queda? Aprovechar esta época de calor para poder al menos disfrutar con nuestros perros en los parques y plazas de nuestras ciudades. Hacer picnics y llevarlos para tener una tarde de entretención y juegos con ellos. Muchos viven en departamento y necesitan el ejercicio. Afortunadamente podemos también aprovechar las pocas grandes iniciativas que sí van acorde a estos tiempos como el Festival Internacional de Innovación Social, fiiS, que no sólo fomenta asistir con tu mascota los días que se desarrolla en parques, sino que además tiene un lugar especialmente acondicionado para ellos, colaborando con fundaciones de bienestar animal. Eso es pet friendly. Y eso debiera ser Chile. Siempre, en todo momento, sin excepción, sin restricción de raza, de locación. Las personas tienen mascota y sí son parte de la familia. No podemos dejar a un miembro de la familia encerrado en la casa mientras el resto se divierte. Por favor comprendan eso de una vez y pongámonos a la altura de lo que creemos que somos, un país en vías de desarrollo.