Felicitaciones al Hospital Marcos MacuadaSeguridad en los colegios
Hace algunos días me vi en la necesidad de acudir al centro de urgencia del Hospital Marcos Macuada, y cosa curiosa y relevante, desde la entrada me atendieron bastante bien. Luego de esperar 15 minutos me llamaron. Me atendió una funcionaria, quien me dice que espere porque me tiene que atender el médico.
En un momento llegó el doctor y para mi sorpresa, él señala que había que hacer exámenes y más que nada, para bajarme el estado febril. El examen consistía en sangre y orina. Además, me colocaron suero en dos oportunidades.
Ante tal situación, no salía de mi asombro, porque en un tiempo pasado solo se disponía en colocar una inyección y a lo sumo, una que otra pastilla. No es que atendieran mal o faltaran recursos, más bien, al parecer por falta de personal médico había uno solo de turno, al que había que llamar en casos de "suma urgencia", y casi siempre había demoras en su llegada.
Hoy la situación ha cambiado y para bien. Se está contando con dos médicos de turno, un tecnólogo, un paramédico y dos enfermeras, más el personal de servicio. Es todo un equipo que atiende bastante bien a los pacientes que llegan a urgencias.
Señalo que permanecí alrededor de dos horas y antes de despedirme, el doctor me señaló: "en unos dos a tres días acuda a la consulta", a la vez que me hace entrega de un documento con el diagnóstico de lo tratado.
¿Qué me quedó?, solamente darles mi mano agradeciendo la atención que me fue facilitada.
Una reflexión: ¡Qué cambio! un servicio de urgencia que de ponerle una nota, simplemente sería un siete.
Como se notan los cambios del ayer al de hoy, que simplemente hay más médicos que se merece Tocopilla y su gente.
Finalmente vayan los agradecimientos y felicitaciones a todo el equipo de salud de la sala de urgencia.
¡Gracias!
Juan Rivero Marfull
dirigente Junta de Vecinos
"05 de Octubre"
En 2001, el Ministerio de Educación en conjunto con ONEMI dictaron la Resolución nº 51 que establece la obligatoriedad de que los colegios cuenten con un plan integral de seguridad y prevención de riesgos (Plan Escuela Segura).
Este esquema establece una metodología para que los colegios pudieran detectar todos los riesgos en sus instalaciones y, a partir de eso, generar un plan de contingencia que permita afrontar emergencias.
Aunque este plan debiera obligar a los colegios a cumplir con estándares mínimos de seguridad, no establece criterios específicos como, por ejemplo, que los arcos deben estar empotrados. Por eso se hace necesario contar con una norma que establezca el tipo de material que deben tener las estructuras.
Belkyss Mardones, Unab