En los últimos cuatro meses, la boleta de luz que llega a la casa de doña Liliana Adasme no ha pasado de las cuatro lucas. Antes, incluso ha pagado cero pesos. Esto es porque su casa es de las pocas (sino la única) de Antofagasta que tiene siete paneles solares y con eso le da energía a toda la casa. Lo que no se usa, se inyecta a la red. Por eso, a veces la cuenta puede quedar en cero pesos.

Si bien el sistema es medio caro y sale a cuenta a largo plazo (calcule que toda la instalación salió unos cinco millones. Si le salía unos 40 mil pesos mensuales antes de luz, la inversión se recupera en diez años), a Liliana el sistema le ha significado bastante, dado que ahora está sin pega. "De todas maneras, en estos momentos es beneficioso para todos", cuenta sobre su casa en Mehuín con Antilhue, en la población Coviefi.

Sin embargo, con todo este tema del cambio de medidores su casa está en una especie de limbo, porque puede que no lo cambien, como puede que sí. Esto, porque el medidor que tienen es bidireccional. Aunque aún no se sabe cómo será en detalle lo que tendrán los famosos "medidores inteligentes" que van a instalar de aquí al 2025, al menos en Enel (la antigua Chilectra, de Santiago) los medidores son bidireccionales y también permiten vender excedentes de energía.

De acuerdo a lo informado por la seremi de Energía, el cambio de equipo para las casas que tienen paneles fotovoltaicos (que ya tienen medidor bidireccional, acogidas a la ley 20.571, de net billing) dependerá de las definiciones técnicas para el medidor inteligente, el cual aún no está definido. O sea, aún, en teoría, si llegan a cambiar el medidor a esta casa de la Coviefi es un tema que está en el aire.

Hablamos con Rodrigo Castillo, director ejecutivo de la Asociación de Empresas Eléctricas, quien señaló que los medidores nuevos tienen la capacidad de bidireccionalidad. O sea, que si hay un panel solar, "éste permite justamente medir las inyecciones y por lo tanto, descontarlo de la tarifa", cuenta.

Info en la pantalla

"No creo que nada (pase) mucho, porque nosotros tenemos un empalme acá junto con este medidor", apunta Liliana Adasme a su medidor, que aunque desde afuera se ve igual al que tenemos todos en la casa, tiene un visor digital que va entregando distintos tipos de cifras. En la casa nos cuentan que va contando kilowatts inyectados al sistema, los que entran, los que salen, promedio, etcétera.

A propósito de toda la polémica, la dueña de casa es clara con el tema. Le parece "una sinvergüenzura" lo de esta obligación para cambiar los medidores. "Sobre todo aquí en esta región, que nosotros tenemos como para generar energía nosotros mismos. Lo que pasa es que este sistema es muy caro, el que tenemos instalado en nuestra casa", señala Adasme. Si se subvencionara, otro gallo cantaría.

Por otro lado, con el tema de los precios, Rodrigo Castillo, de la Asociación de Empresas Eléctricas, afirma que ya fue incorporado en las tarifas en septiembre del año pasado, "así que no hay ningún costo adicional para usted", dice. ¿Pero será para siempre? "Las tarifas se calculan cada cuatro años. La próxima se hace el año 2021", cuenta.

Por ahora, no hay información de cuándo será efectivamente el cambio de los medidores en nuestra zona. "En todas las regiones van a partir al mismo tiempo, pero no a todas las comunas o todas las casas de cada región, porque esto va a ser en el tiempo", señala Rodrigo Castillo, ejecutivo de las eléctricas.