Cartas
Karadima
Estimado director:
A estas alturas del partido, a propósito del Mundial, no interesa en lo más absoluto la declaración del hermano del cura Karadima, cuando espeta que el tristemente célebre y consuetudinario abusador y pedófilo de la Parroquia El Bosque no pedirá perdón por sus fechorías, por ser muy soberbio, toda vez que hoy, el pedir perdón está muy de moda en relación a los abusos de curas y afines.
Es de esperar, que si bien el cura Karadima logró escabullirse de rendirle cuenta a la justicia terrenal, no tenga la misma suerte con la celestial.
Cristo cuando deba juzgarlo, se debe preguntar antes: ¿Qué harían los chilenos abusados con el cura Karadima en mi lugar ? Siguiendo los consejos de nuestro Papa Francisco.
Luis Enrique Soler Milla
Carabineros
Señor director:
En relación a los recientes hechos de violencia hacia Carabineros, de los cuales el último le costó la vida al cabo primero Óscar Galindo, es necesario que las autoridades políticas tomen medidas que velen por la protección y el respeto que merecen nuestros policías.
Es necesaria una reacción enérgica en contra de aquellos que ofenden y agreden a Carabineros, quienes son la representación más cotidiana del imperio de la ley, porque tolerar actos de menosprecio a su figura atenta gravemente contra la civilidad de nuestra sociedad.
Si un Carabinero es objeto del desprecio de cualquier desaforado es la ley de dicho desaforado la que termina primando. Por esta razón, celebramos el enérgico respaldo entregado por el Presidente de la República y el general director de Carabineros al funcionario policial que actuó en legítima defensa la madrugada del miércoles.
Con el recuerdo aún intacto del cabo primero Galindo, mártir 1208 de la institución, es necesario reivindicar el trabajo de Carabineros de Chile y su abnegada entrega por el orden y la patria.
Antonio Barchiesi