Rodrigo Tapia Jara
Por una lamentable situación debieron pasar ayer alrededor de veinte familias tocopillanas, a las cuales les profanaron los nichos donde tiene enterrados a sus seres queridos en el cementerio de la ciudad.
La alarma se dio ayer cuando algunas personas llegaron en la mañana al camposanto para llevarles una ofrenda floral a sus familiares y se encontraron con la sorpresa que les habían abierto la chapa o quebrado el vidrio de la puerta del nicho para robarles los adornos de navidad que les habían dejado para hermosearles el lugar.
La noticia comenzó a difundirse por redes sociales donde a medida que pasaban las horas, se conocían más casos de personas que habían sufrido por esta desagradable situación, algunas de las cuales no era primera vez que pasaban por esto.
Este fue el caso de Marcela Calderón quien comentó que va todos los días a ver a su esposo fallecido recientemente, sin embargo ayer llegó un poco más tarde por lo que al mediodía le avisaron que también había sido víctima del vandalismo.
Si bien indicó que le robaron unas figuras que no cuestan tanto dinero, sí tienen una gran valor sentimental para ella por lo que le pidió al municipio que "debe hacerse cargo de esta situación" ya que todos los días escuchan o saben de situaciones parecidas a las que ocurrieron hoy al interior del recinto.
Otra de las afectadas fue la vecina Elizabeth Meza, a quien también le avisaron de los problemas que habían ocurrido en el lugar por lo que fue a ver y se encontró con la sorpresa que le quebraron el vidrio del nicho de sus padres para robarles unas figuras de Navidad.
Andrea Arriagada es otra persona que sufrió de estos robos: al nicho de su marido le reventaron la chapa también para robarles algunos adornos. A ella lamentablemente no es la primera vez que le pasa algo así, ya que anteriormente pasó por hechos muy parecidos.
Desde el municipio, hasta el cierre de la edición no emitieron ningún comunicado, ni contestaron los llamados.
20 nichos aproximadamente, habrían sido víctimas de estos actos vandálicos que se repiten en el cementerio.