Consternación y dolor produjo en su numerosa familia, amigos y compañeros de la rayuela la muerte del querido vecino Adolfo Díaz Rojas, conocido cariñosamente como "Chamullo".
Su deceso se produjo este martes a las 11:00 horas en el hospital Marco Macuada y sus restos mortales fueron velados en su casa de calle Sucre 1340, lugar desde donde salió el cortejo fúnebre en dirección al camposanto el día de ayer.
Sus funerales fueron acompañados por una numerosa comitiva en la cual se hicieron presentes familiares, compañeros de la rayuela del Puerto Salitrero y muchos amigos y conocidos.
En el momento de su despedida su nieto Rodrigo resaltó su carácter alegre y dicharachero características que hicieron que en vida cosechara muchas amistades que hoy están con el dolor de la partida del camarada de tantos años.
Le sobreviven su viuda Rosa Medina Alfaro, 9 hijos, Jocelyn, Jennifer, Darwin, Adolfo, Yeiko, Cristian, Cecilia y Maykol, quienes le dieron la alegría de 15 nietos y 4 bisnietos que hoy lloran la partida del querido "tata".
En su vida laboral se desempeño como técnico en aparatos electrónicos en forma particular y en la parte deportiva en su juventud fue un gran jugador de basquetbol, además de desempeñarse como árbitro de esta disciplina, pero donde dejó su imborrable huella fue en la rayuela del Puerto Salitrero.
En el deporte de los tejos y quemadas participó por el club Norte Grande, además de ser integrante de varias selecciones que representaban a Tocopilla en torneos regionales, también fue dirigente de la Asociación de Rayuela, actividad donde aportó para que esta disciplina siguiera creciendo.
Hoy solo queda el recuerdo de quien se ganó el cariño y aprecio de muchas personas, eso quedó demostrado en el momento de su último adiós donde las muestras de dolor fueron acalladas por el aplauso espontáneo.
Lo despidieron con aplausos
En el momento en que fue sellada su sepultura los presentes en el sepelio despidieron al "chamullo" con un aplauso espontáneo que demostró el cariño y aprecio de quienes le conocieron y compartieron con él en vida.
Redacción
La Estrella de Tocopilla.