Cartas
La Tirana grande y La Tirana chica
Señor director:
Nuevamente este julio, los caminos de tierra que llevan al poblado se vieron repletos de visitantes, carabineros, peregrinos, a pie, en vehículos. Este 11 de julio, los bailes de Tocopilla se congregaron con miles de fieles con antorchas que iluminaron el paso de la peregrinación desde la Cruz del Calvario hasta el templo, para dar comienzo a esta festividad religiosa, la más grande del norte de Chile.
En la explanada del templo esperaron peregrinos, promesantes, bandas, bailes, con sus estandartes, para que después que se golpearan tres veces las puertas de madera del templo, se abrieron, para recibir 198 cofradías que llegaron a venerar a la Patrona.
Ahí la comunidad entregó las llaves del templo a los centinelas y camareras de la Virgen, para que se hicieran cargo de la festividad, misas, la noche máxima con fuegos artificiales de la Víspera, la procesión por el pueblo de la imagen engalanada con miles de cintas y naranjas.
Cada año aumenta el fervor religioso popular, especialmente cuando hay escasez de trabajo, falta mayor justicia social, para pedir por la visita del Papa y más acogida a los que llegan, ya que los peregrinos se prepararon todo el año ensayando sus bailes, preparando hermosos y decorativos trajes con lentejuelas.
Varias generaciones de mi familia hemos acudido al lugar, donde antes no había agua, ni luz, pero siempre el calor calcinante del mediodía y el frío inmenso en las noches, disminuido con las fogatas, más cientos de cirios prendidos en la iglesia y el calor humano que se produce con los promesantes chilenos, y extranjeros, los retumbes de bombos que acompañan a los bailes, chinos, gitanos, zambos, chunchos y vistosas diabladas y morenadas. Los fieles que no pudieron llegar a la Tirana en Iquique, aquí en Calama con igual fervor se celebrará la Tirana chica, pero sin la magia del desierto del Tamarugal, sin olores de anticuchos, sopaipillas calientes gigantes y el vibrar de bombos y tambores que retumban sin parar.
Nancy Monterrey C.
Gracias Alexis
Cada año que viene me siento mejor por todo lo que hace por su ciudad y en especial por los niños tocopillanos que son los que más disfrutan con los juegos, el torneo y el poder ver a su ídolo en vivo y en directo.
Pasaran los años y Sánchez será recordado no solo por un crack del fútbol, sino que también por estas acciones con su gente.
Hugo Pérez