Candidato "instantáneo"
Estimado director:
Hoy en Chile, en menos de lo "que canta un gallo", un médico, un director de cine, un periodista, un empresario o animador de TV se transforma en candidato a La Moneda, en un adalid esperado por muchos, con las supuestas recetas bajo el brazo para atacar todas las pestes posibles, una mochila cargada de parches y con el plus que cualquier problema que le surja, se podrá arreglar en el camino, pero necesariamente debería tener "el don de la palabra" para que muy naturalmente, casi sin decirlo, demuestre ser muy centrado, extremadamente confiable y consecuente "a morir".
Tal vez un publicista o asesor de imagen le debiera aconsejar y sazonar todas sus intervenciones con una sonrisa "pep" y si no la tiene se la fabrica. En resumidas cuentas, cualquier chileno, con solo la licencia secundaria, con más de 35 años de edad (Cap. IV, Art. 25, Const. Política) puede entrar a la carrera presidencial.
Ahora si tiene una profesión como médico o ingeniero, el uso de un delantal blanco o de un casco del mismo color, le daría más "enjundia" a su postulación. Recordar que hace un buen tiempo, incluso tuvimos un cura de candidato, el de Catapilco.
O sea "llegar, abrazarse y está incluido en el voto", luego lo eligen y después se quejan.
Luis Enrique Soler Milla