Cartas
En la recta final
Señor director:
Qué lamentable que los candidatos que postulan al cargo de alcalde por Tocopilla no se atrevieran a debatir. ¿Quién sabe las razones?
Quizás no hay interés o no se atrevieron a mostrar sus programas ante un electorado que desconfía de los políticos, en la peor crisis de credibilidad de los últimos tiempos, por todo lo que está sucediendo en el país, desde el financiamiento ilegal de la política, las platas negras, la corrupción y en que definitiva hace que desconfiemos de los partidos, de los independientes y de todo aquel que postule a un cargo de elección popular.
Entonces lo claro está es que no debe ganar la abstención ni menos optar por reelegir a personas que lo hicieron tan mal como para premiarlos con un nuevo periodo, eso sería de tontos y conformistas.
En estas elecciones se medirán muchas cosas. Lo primero es saber si el nuevo alcalde tendrá o no el coraje de hacer cambios en el municipio, si se harán auditorías, si habrá sintonía con las empresas, si tendrá el perfil técnico para crear proyectos. Que las áreas verdes, el terminal de buses, el borde costero, el desarrollo, el turismo, la seguridad y el medio ambiente sean realidades abordables y que éstas no queden en promesas de papel. Ojo que todo lo que se promete está en las obligaciones que debe cumplir un edil.
Vean ustedes qué progreso ha tenido Tocopilla en estas dos décadas y si los candidatos actuales aportaron en algo al "desarrollo". Por lo que se ve poco o nada si vemos que las calles son las mismas, hay más contaminación, hay más cesantía, están los eternos concejales, el mismo Caleta Boy, el mismo borde costero sin atractivos, el mismo estadio O'Higgins abandonado, un estadio municipal peor que nunca, las escuelas viejas y con plagas de palomas, el teatro de la cultura abandonado, el terminal pesquero sin uso, el comercio ambulante que llegó para quedarse, un alcalde que hostigó a las termoeléctricas, etc.
Ese es el Tocopilla actual en el que vivimos todos. Por eso y muchas razones más es que nuestro puerto no progresa, no avanza y cuyo desarrollo se fue a otras ciudades y quién sabe si en poco tiempo más terminemos siendo solo una caleta pesquera, siempre y cuando no se le ofrezca mar a los bolivianos.
Tocopillanos, un llamado, hay que ir a votar sí o sí el próximo 23 de octubre. Si usted quiere cambios simplemente concurra a sufragar y no se queje después. No permita que otros decidan por usted.
Y finalmente, como dice el refrán no hay mal que dure cien años ni tonto que lo resista.
Cristian Cárdenas