Condenan a individuos por violación de morada
El fiscal jefe de Tocopilla Andres Godoy Rojas, obtuvo dos condenas en contra de Alan José Quinzacara Castillo de 24 años de edad y José Luis Oviedo Rojas de 28, a quienes el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Antofagasta, encontró culpables de dos delitos de violación de morada, perpetrados el año pasado en el Puerto Salitrero.
Los hechos por los que acusó el fiscal Godoy, dan cuenta que en horas de la madrugada, los acusados ingresaron al interior de un inmueble ubicado en calle Matta, fracturando la chapa de la puerta principal, lugar donde procedieron a registrar las diferentes dependencias.
De esta forma, los imputados seleccionaron diversas especies para sustraer, acción que fue advertida por vecinos del sector quienes llamaron oportunamente a los carabineros de la Cuarta Comisaría de Tocopilla.
Aquí los uniformados se dirigieron rápidamente hacia el lugar de los hechos, sorprendiendo a ambos individuos al interior de la vivienda, los que al verse acorralados por el personal policial emprenden la huida del sitio, siendo detenidos en un domicilio colindante al inmueble siniestrado momentos antes.
Juicio
En la audiencia respectiva, los acusados renunciaron a su derecho a guardar silencio y declararon que no ingresaron a la casa de calle Matta para robar, sino que lo hicieron porque uno de ellos perdió la llave de su vivienda, la cual está colindante con la del afectado en este caso.
Aquí señalaron ser amigos de toda la vida del dueño de la casa y tenían la autorización para pasar de un inmueble a otro.
Por otro lado, explicaron que el llegar al lugar la puerta de calle se encontraba abierta y que ellos no la forzaron.
En la misma instancia, los vecinos declararon que efectivamente las tres casas colindantes compartían un patio en común y el dueño de la vivienda a la que habían ingresado los imputados dijo que si bien conocía a ellos desde que eran niños, cuando él salió dejó la puerta con llave y que no era efectivo que la misma hubiera quedado abierta.
Ambos condenados recibieron dos penas, una de 174 días de reclusión menor en su grado mínimo y otra de 61 días de reclusión menor en su grado mínimo, las que se dieron por cumplidas por el tiempo que estuvieron privados de libertad a la espera del juicio.