Cuando M. tenía tan sólo once años, fue engañada por un profesor de su establecimiento educacional, quien la violó y abusó de ella en reiteradas ocasiones, sin que en su familia, ni en la escuela donde estudiaba, se percataran de este desagradable hecho.
Esta terrible confesión, corresponde a una joven tocopillana que según confidenció a La Estrella de Tocopilla, debió lidiar con esta espantosa situación por más de cuatro años y que solo termino físicamente cuando se fue de la ciudad, pero que aún tiene en ella traumas psicológicos difíciles de olvidar.
La Nueva
M. llegó a Tocopilla cuando tenía once años y como toda alumna nueva, era un poco tímida, por lo que le costó hacerse de amigos en el curso donde ingresó, situación que aprovechó el profesor para acercarse a ella, primero como amigo y luego como un agresor.
De a poco este "docente" se fue ganado la confianza de la joven, nombrándola como presidente de su curso y poniéndola siempre como un ejemplo para los demás alumnos, cosa que le fue jugando en contra, ya que sus compañeros empezaron a aislarla por ser la preferida del profesor.
Situación que derivó en que se aislara más y más, terminando en no tener amigos y sufrir acoso por parte de sus compañeros. Debido a esto, comentó la joven, este hombre fue convirtiéndose en una especie de amigo, que con el tiempo empezó primero con los toqueteos y luego en algo más.
La primera vez
Habían pasado más de cuatro meses de llegado a ese curso, cuando el profe atacó la primera vez. La citó al taller donde impartía sus clases y la hizo entrar a un estante donde la tocó por todos lados y la obligó que le hiciera lo mismo a él.
Consultada por qué no denunció de inmediato lo que estaba sucediendo, indicó que el tipo la amenazó que nadie le creería lo que había pasado, porque él era una persona importante y ella solo una alumna cualquiera.
Además ella tenía un hermano menor que estaba en el mismo colegio, el cual según comentó la joven, este inescrupuloso hombre también amenazó con hacerle daño si contaba algo.
Por miedo y vergüenza nuevamente accedió al llamado que este sujeto le hizo al taller, que está al interior del establecimiento educacional, donde está vez la violó, situación que no paró por muchos años más.
La media
Desde sexto hasta octavo básico esta joven sufrió los abusos del profesor de su colegio. En todo ese tiempo sus compañeros la trataron mal y la molestaban porque algunos "sabían" de su relación con este sujeto.
Entonces cuando egresó de básica pensó que su mala suerte había cambiado, que los golpes que le propinó cuando se negó a tener relaciones sexuales con él también, sin embargo nada de eso terminó, ya que la profesora jefe que tuvo en el nuevo curso era un familiar de él.
Por lo que nuevamente aprovechó esta situación para amenazarla y obligarla a que se vieran, situación que no terminó hasta que su padre separado ya de su madre, se fue a vivir a Calama, donde ella lo siguió.
Charlas
Hace poco la víctima estuvo en la ciudad contando su experiencia en una actividad organizada por el Daem, donde ante varios trabajadores de las escuelas de Tocopilla contó su experiencia, como una forma de terapia.
Ha pasado el tiempo y uno se pregunta ¿cómo nadie del establecimiento se dio cuenta de la situación en tantos años? Y según la víctima, con una demanda de por medio contra este profesor por los mismos hechos realizados a otra alumna.
Cuesta y es difícil pensar que nadie vio o supo nada. Ahora lo más seguro es que todo esto legalmente esté prescrito, pero para todos los que sabían y no hicieron nada, queda la conciencia y el saber que quizás con una actitud más valiente y comprometida una niña inocente se hubiera salvado. J