La experiencia de húngaros, bolivianos, colombianos y peruanos en Tocopilla.
l Ximena Araya Monroy
Tomás Zana nunca había vivido temblores tan fuertes en su natal Hungría, junto a otros 100 extranjeros, entre húngaros, eslovacos y checos, trabajan en la instalación de los filtros de manga en las unidades de la termoeléctrica Norgener y en las últimas semanas, les ha tocado experimentar evacuaciones y sirenas de alerta de tsunami.
Gracias a la traducción de la profesora de inglés Valeska Araya, pudimos saber, a través Tomas, uno de los pocos que domina el inglés, que en su caso no pasó miedo, dado que está alojado en una casa ubicada en Colón con Matta, dentro de la zona de seguridad y que no cuentan con kits de emergencia, por lo tanto actúan instintivamente.
Hilda Chocllo, Salomé Martínez y Primitiva Coria son las dependientes bolivianas de la Fuente de Soda, Salinas y afirman que se lo toman con calma.
En el caso de Primitiva cuenta que vivió el sismo tranquila en la pieza que arrienda, la cual se encuentra en la zona de seguridad.
"Primer vez que vivo este tipo de eventos, pero estamos tranquilas, vemos a los chilenos más preocupados", señaló la vecina de Potosí.
La única preocupación de Hilda Chocllo es que aún no ha podido comunicarse con su familia, que vive en una zona al interior de Sucre, para decirles que se encuentra bien. "El sábado me voy a comunicar con ellos porque nos contactamos los fines de semana".
La adolescente colombiana Luisa Salazar, afirma que en su Cali natal casi nunca se han registrado terremotos. "Ayer estuvo fuerte, subí a Matta". En su caso le ha comunicado a su familia en Colombia que está bien a través de las redes sociales.
Por último la anfitriona del Restorán "Tradiciones Peruanas", afirmó, "Hemos sufrido terremotos, pero nunca alertas de tsunami porque Tacna está bien alejado de la costa. Nos estamos acostumbrando a estas alertas para prevenir desastres", refirió con respecto a sus compañeros nueve peruanos y tres bolivianos. J
l En Tocopilla la mayor cantidad de visas de residencia del 2013, fueron tramitadas por bolivianos, seguido por colombianos y en tercer lugar peruanos.
También llama la atención de la presencia de ciudadanos húngaros, checos y eslovacos que llevan más de un año en el puerto salitrero, prestando servicios a una empresa contratista de Norgener.