Comerciante sufrió el robo de dos congeladoras, chalecos salvavidas y productos para vender.
l Ximena Araya Monroy
Literalmente de brazos cruzados se quedó el profesor Iwan Chang, quien tenía a cargo uno de los locales de la Playa Artificial Covadonga, donde administraba los baños y arrendaba kayaks y sombrillas, cuando este fin de semana desconocidos arrasaron con todo a su paso.
Este sábado por la mañana se fue a dar una vuelta al local, encontrando todas las puertas forzadas y las protecciones metálicas destrozadas.
Desde el local habían sido sustraídas dos conservadoras que contenían más de 200 helados. Máquinas de gran tamaño que claramente requirieron de un vehículo para llevarse estas especies y donde extrañamente nadie vio nada, tomando en cuenta que esta playa se repleta durante las noches, después del carrete nocturno.
También se llevaron herramientas, hasta los espejos que el Municipio había instalado el 15 de enero, ya que recordemos antes del año nuevo estos locales habían sido blanco del vandalismo.
En esa ocasión delincuentes rompieron puertas, rayaron y destrozaron grifería, sin motivos aparentes, por lo cual el municipio, a través del departamento de Aseo y Ornato, tuvo que invertir nuevamente para reparar los baños, tiempo en el cual los baños no contaban con puertas y la gente tenía que ingresar de a uno
Tres semanas atrás también habían ingresado pero ocasionaron daños menores.
"Si tu me preguntas volverías a invertir no, nunca más, porque nunca estaba tranquilo, venía a mirar a cada rato si me estaban robando", señaló este emprendedor.
Para evitar que vuelvan ahora a destrozar los baños, se clausuraron soldando las puertas de los locales.
El otro lugar ubicado en el costado norte de la playa, tuvieron mayor suerte, ya que se dieron cuenta antes que los ladrones pasaran a buscar el segundo botín, que se encontraba perfectamente ordenado, listo para llevar.
Para colmo de males un tercer comerciante de juegos infantiles sufrió el robo de un parlamente en pleno día. J